Redefiniendo Masculinidad: La Alianza de Hombres en la Lucha por la Igualdad de Género

La incertidumbre sobre el futuro de varias series de Televisión Española ha captado la atención de los seguidores del canal. Entre ellas, La Promesa y Valle Salvaje han sido objeto de especulación reciente sobre la cantidad de capítulos que les quedan por emitir en La 1. La producción y su relato son parte de un contexto mediático que sigue evolucionando, y que se presenta de manera cada vez más íntima y reflexiva.

Amparo Piñero, actriz protagonista de La Promesa, ha aprovechado su plataforma para hablar sobre la representación de la mujer en la ficción y más allá de ella. En un programa especial de Objetivo Igualdad, disponible en RTVE Play, hizo un análisis profundo sobre los estereotipos de género que, a pesar de los pasos hacia adelante, persisten en la sociedad. Su papel como Martina de Luján en esta serie, ambientada en 1916, sirve como un espejo de la historia que aún resuena en el presente.

La experiencia de interpretar a Martina implica no solo la inmersión en una época histórica complicada, sino también vivenciar la presión estética de los tiempos que representa, simbolizada en el corsé que usa en las grabaciones. Un elemento que Piñero define como un «recordatorio» de las restricciones que enfrentaron las mujeres, denunciando cómo la moda, en ocasiones, es solo una «limitación disfrazada de elección».

La actriz, conocida por su trabajo en series como Dos vidas y Los Farad, no escatima en señalar las similitudes entre las exigencias de su personaje y las presiones contemporáneas, tales como la búsqueda de la perfección física y las críticas hacia las decisiones personales sobre el cuerpo. “No se trata de imponer un único modelo de feminismo”, reflexiona con sinceridad. También enfatiza la importancia de liberarse de la autoexigencia de ser “la militante perfecta”, pues esto puede convertirse en una carga.

La serie no solo ha destacado por sus personajes femeninos robustos, sino que también ha dado visibilidad a un equipo técnico mayoritariamente femenino, desafiando así las normas tradicionales en la industria audiovisual. Este aspecto ha sido un motivo de orgullo para Piñero, quien celebra el crecimiento de un entorno donde la voz de las mujeres se escucha tanto delante como detrás de las cámaras.

En un contexto que requiere transformación cultural, la actriz ha manifestado su aprecio por la colaboración masculina en la lucha por la igualdad. “Hay muchos hombres muy feministas, muy bien formados y con visiones preciosas sobre el tema”, expresa. Este señalamiento refleja su convicción de que el camino hacia una sociedad más equitativa no puede ser solo un esfuerzo de las mujeres, sino que debe contar con aliados comprometidos que también participen activamente en el cambio.

Scroll al inicio
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.