En una reciente evaluación de sus primeros 100 días de gobierno, el presidente Donald J. Trump ha sido objeto de un torrente de elogios por parte de diversos líderes políticos y miembros del Congreso. Con afirmaciones que sugieren que su administración ha logrado más en este breve periodo que muchas otras en un mandato completo, los comentarios reflejan un sólido apoyo entre sus compañeros republicanos.
El presidente ha sido elogiado por realizar una serie de acciones decisivas en áreas clave como la seguridad fronteriza, la economía y la energía. La actividad en la frontera, en particular, destaca en las declaraciones, con muchos legisladores afirmando que las medidas implementadas por Trump han llevado a una notable disminución en los cruces ilegales, mientras que las deportaciones de criminales han aumentado significativamente.
El líder de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, abrió el desfile de comentarios al señalar que Trump ha logrado mucho más para el pueblo estadounidense en estos primeros 100 días que lo que, según él, hizo la administración de Biden en cuatro años. Esta postura fue respaldada por otros altos funcionarios republicanos, incluidos el líder de la mayoría en el Senado, John Thune, y el presidente del comité de conferencia republicano en el Senado, John Barrasso, quienes enfatizaron el retorno a lo que describen como “sentido común” en la gestión del gobierno.
Los senadores también han resaltado la restauración de la fortaleza estadounidense y la protección de las comunidades a través de políticas energéticas que, afirman, están revitalizando el sector energético y reduciendo la inflación. Se alega que, con la administración Trump, ha habido una verdadera democratización de los costos de vida para los estadounidenses, señalando descensos significativos en precios básicos de consumibles como gasolina y alimentos.
La narrativa de regreso a la “grandeza americana” también se apoya en la reducción de regulaciones que se perciben como obstructivas desde la administración anterior. Los comentarios apuntan a una desregulación que han asumido como vital para fomentar oportunidades económicas. Además, se destacan los esfuerzos por desmantelar políticas que, desde la perspectiva del partido, estaban alineadas con la agenda demócrata.
Mientras la administración celebra estos logros, también existe una convergencia en la interpretación de que los primeros 100 días han servido como un modelo de lo que el partido republicano considera una sólida gobernanza. Las palabras de muchos miembros del Congreso recalcan que el camino por delante es aún más prometedor, haciendo eco de un sentimiento de que los próximos años serán cruciales para consolidar estos cambios.
La evaluación del primer centenar de días de la presidencia de Trump se presenta, así, no solo como un logro administrativo sino como un pulso a la narrativa más amplia del conservadurismo en Estados Unidos, que buscará capitalizar este momento de cara a futuras elecciones. Con un terreno fértil de apoyo y promesas que, según los republicanos, se están cumpliendo, el presidente Trump parece dispuesto a continuar con su agenda “América Primero” en los meses y años venideros.
Fuente: WhiteHouse.gov