La Mesa de Precios de melón y sandía de Castilla-La Mancha ha lanzado un comunicado urgente a los productores de estas frutas de la región, aconsejándoles cautela y planificación en las plantaciones iniciales que están preparando. El enfoque es estratégico: deben buscar un mercado cuidadosamente, ya que la coincidencia con las campañas de producción de la zona del Levante español plantea el riesgo de saturación y solapamiento.
El contexto es desafiante. En el Levante, tradicionalmente pionero en el ciclo del cultivo de estas frutas, podrían decidirse por aumentar notoriamente el área destinada a la siembra de sandía, animados por el incremento en las lluvias recientes y una política agraria común (PAC) más flexible. Ante este panorama, los responsables de la Mesa han pedido prudencia, subrayando lo crítico de adaptar la oferta a la demanda real y de no ocasionar interrupciones en el suministro que pudieran conducir a una caída en los precios.
A pesar de que se prevé un alza del 10 % en la superficie de cultivo de sandías comparado con el año anterior, se espera un pequeño descenso en la plantación de melones, manteniendo sin embargo una mayor presencia en la región. En la campaña pasada, se registraron unas 5.600 hectáreas de melón frente a 3.200 de sandía. Aunque el melón sigue predominando en términos de extensión cultivada, la producción de sandía podría alcanzar niveles equiparables al melón este año, siempre que las condiciones climáticas no presenten cambios adversos.
En Castilla-La Mancha ya están en marcha los trabajos de preparación de suelos, y los primeros acolchados ya son visibles en el paisaje agrario. Las plantaciones que se realicen en abril se realizarán bajo manta térmica para protegerlas de las temperaturas más bajas. Se anticipa un ligero incremento en este tipo de producción, junto con la expectativa de que los mercados externos mantengan un comportamiento similar al de años anteriores. La condición es que el clima en Europa sea favorable para el consumo de melón y sandía, apoyando un aumento potencial en la demanda de sandía y un nivel estable para el melón.
Se enfatiza especialmente la alta calidad de ambos productos obtenidos en la región en los últimos años, una fortaleza que el sector espera mantener para que los precios se mantengan en niveles beneficiosos. Con la mirada puesta en el equilibrio entre producción, calidad y mercado, los actores del sector del melón y sandía de Castilla-La Mancha se preparan para afrontar una temporada más en el competido mercado de frutas de verano.
