En el pleno ordinario de Pozuelo, el alcalde socialista, Gregorio Moreno, sigue sin una propuesta definitiva para paralizar el proyecto de CEFUSA-El Pozo que pretende la instalación en la finca La Lossa, de 6 explotaciones de ganadería industrial porcina con capacidad para 85.000 cerdos.
En febrero, el alcalde empezó a asesorarse con el equipo técnico y jurídico que ofrecía la Diputación de Albacete, “pero 8 meses después no hemos visto, ni ha sido aprobado, ningún cambio de la normativa municipal ni ninguna ordenanza que pueda parar este proyecto y sigue afirmando que están trabajando en ello”, señala Inma Lozano, portavoz de la plataforma.
Desde la plataforma No a la macrogranja en Pozuelo y Argamasón, apremian por la urgencia del proyecto, para ejecutar cuanto antes una moratoria y así empezar a tramitar el cambio de Plan de Ordenación Municipal porque el proyecto puede salir en cualquier momento y ya hace muchos años que se viene perdiendo el tiempo.
En 2017, CEFUSA-El Pozo presentó un proyecto de 9 explotaciones, con más de 50 naves y con capacidad para 140.000 cerdos que fue archivado por la Junta de Comunidades por tres puntos clave: no disponer de agua suficiente, no contar con estudios del impacto sobre la avifauna y la falta de un plan de vertido de purines satisfactorio. La plataforma celebró librarse de esa forma de vivir cerca de una macrogranja: moscas, olores, enfermedades respiratorias, pérdida de calidad de vida, aguas contaminadas, devaluación de propiedades, despoblación… Pero cuatro años después y tras la inacción del equipo de gobierno, que ha pasado estos años sin utilizar las herramientas disponibles para blindar su municipio, llega un nuevo proyecto.
“Todavía se está a tiempo, pero es un tiempo que el alcalde y su equipo de gobierno pierden con excusas, con palabras, pero no con hechos. Nos dicen que están en ello, que se están asesorando, pero no llegan a aprobar la dichosa normativa”, comenta la portavoz.
Gregorio Moreno anunció que no iba a acudir a la reunión informativa, porque ”no va a dar ninguna explicación a la plataforma, que el lugar para dar las explicaciones pertinentes es la sala de plenos” dicen desde la plataforma.
Ante la actitud, los vecinos cansados de tantos rodeos exigen que haya un fecha límite para iniciar los trámites del campo del POM y una moratoria hasta que se apruebe: “El pueblo está paralizado, hay gente que no se atreve a comprar o arreglar su casa hasta que esto no se frene por completo”, apuntaba el portavoz del grupo popular.