No cabe duda de que uno de los grandes retos que afrontan hoy las empresas es la retención del talento. Este concepto va mucho más allá de ofrecer un salario competitivo y unas buenas condiciones laborales —que también—, pero consiste en diseñar una propuesta de valor lo suficientemente atractiva como para que los empleados no se terminen desmotivando ni sientan la necesidad de buscar nuevas oportunidades.
Cuando una organización logra fidelizar a sus trabajadores, los beneficios son evidentes. Entre ellos, podemos mencionar la reducción de costes de rotación, una mayor productividad, la consolidación de la experiencia del equipo, un mejor clima laboral, una mayor cohesión y, en definitiva, un servicio de más alta calidad. Tal como remarcan los especialistas en gestión de personas, retener el talento es la base ideal para construir empresas estables, competitivas e innovadoras.
Sin embargo, ¿cómo podemos conseguirlo en un entorno laboral cada vez más exigente y cambiante como el actual? Una de las claves pasa por apostar por dinámicas que permitan reforzar los lazos humanos dentro de la organización. Aquí es donde entran en juego las actividades de team building, que han sido diseñadas para conectar a los equipos más allá del trabajo rutinario. Y para comprender mejor sus beneficios, hemos hablado con los expertos de Viviendo del Cuento, una empresa especializada en crear experiencias corporativas únicas que marcan la diferencia.
Permite establecer lazos de confianza entre los empleados
“Uno de los principales problemas que detectamos en muchas empresas es la falta de conexión real entre los empleados”, —señalan desde Viviendo del Cuento—. El team building, explican, ofrece un escenario diferente donde los trabajadores pueden conocerse mejor, compartir vivencias y descubrir afinidades que quedan más allá de los límites del entorno laboral.
La confianza, añaden, no surge únicamente de compartir proyectos, sino también de vivir experiencias que requieren cooperación, creatividad y complicidad. Y esas son precisamente las que estos profesionales se encargan de diseñar para cada evento: actividades que ayudan a romper el hielo, a eliminar barreras jerárquicas y que refuerzan enormemente la empatía entre compañeros de trabajo.
Las actividades de team building permiten mejorar la comunicación
Otro de los beneficios más destacados está relacionado con la comunicación interna. Según destacan los expertos de Viviendo del Cuento, “cuando los empleados participan en dinámicas de grupo, aprenden a escuchar activamente, a coordinarse y a expresar sus ideas de forma clara y respetuosa”.
Estas competencias, que parecen sencillas, son en realidad esenciales para el día a día en cualquier entorno laboral. De hecho, en muchos equipos de trabajo los conflictos no surgen por falta de talento, sino por fallos de comunicación. En este sentido, podemos decir que las experiencias de team building pueden funcionar como una especie de entrenamiento práctico cuyo aprendizaje está pensado para trasladarse directamente al ámbito de la oficina.
Descenso del estrés laboral
La presión y las cargas de trabajo suelen generar altos niveles de estrés en las plantillas. Frente a esto, el team building se presenta como un paréntesis saludable para la salud de cualquier organización. “Lo que hacemos es sacar a los empleados de su rutina y ofrecerles un espacio diferente donde puedan desconectar, divertirse y liberar tensiones en un entorno distendido”, —indican desde Viviendo del Cuento—.
Como resultado, obtenemos un equipo más relajado, con energías renovadas y mejor disposición para afrontar los retos del día a día. Además, un ambiente libre de tensiones favorece la creatividad, la resolución de problemas y la cooperación entre los distintos departamentos y entre los propios empleados.
Permite incrementar el compromiso y la motivación
Cuando una empresa invierte en actividades que ponen a sus trabajadores en el centro, el mensaje es claro: ellos importan. “El simple hecho de dedicar tiempo y recursos a organizar experiencias para el equipo ya es, en sí mismo, una buena manera de mejorar e incrementar el compromiso de los empleados hacia la organización”, —afirman los profesionales de Viviendo del Cuento—.
Este tipo de acciones no solo permiten mejorar la motivación a nivel individual, sino que también permite que cada persona sienta que forma parte de algo más grande, es decir, de un proyecto común con propósito y valores compartidos. Y esa sensación de pertenencia es uno de los motores más poderosos para retener el talento.
Las actividades de team building fortalecen la cultura de la empresa
No cabe ninguna duda de que cada compañía tiene su propio ADN, su cultura corporativa. Lo difícil es conseguir que esta cultura no se quede en un documento pegado en el tablón de la oficina, sino que se viva y respire en el ambiente en el día a día. Según explican desde Viviendo del Cuento, “las dinámicas de team building permiten transmitir los valores de la empresa de una manera práctica, emocionante y que los trabajadores recuerdan e integran en su rutina”.
Un taller creativo, una actividad solidaria o un reto deportivo pueden convertirse en vehículos ideales para reforzar principios como la innovación, la sostenibilidad, la colaboración o la superación. Así, la cultura corporativa deja de ser un concepto abstracto y se convierte en una experiencia tangible para todos los empleados. Por ejemplo, a través de la web de Viviendo del Cuento, puedes reservar actividades de team building como “La Casa de Papel”, “Videoclip”, “A Tempo”, “Los Intocables” o “Medievo”, entre muchísimas otras.
Descubrimiento y desarrollo de habilidades
Más allá del disfrute y la cohesión, el team building también cumple una función estratégica, ya que permite identificar talentos ocultos. Durante estas dinámicas, algunos empleados sorprenden a sus compañeros y superiores mostrando dotes de liderazgo, capacidad para resolver problemas bajo presión o una gran habilidad para motivar al grupo.
“Lo que sucede en estos espacios es que los roles habituales se rompen y emergen nuevas capacidades que quizás no eran visibles en el día a día”, —explican los expertos de Viviendo del Cuento—. Detectar estas habilidades permite a la empresa aprovechar mejor el potencial de su plantilla y diseñar planes de desarrollo profesional más ajustados.
Todo ello, en conjunto, permite mejorar la retención del talento
La suma de todos estos aspectos, como la confianza, la comunicación, la reducción del estrés, la motivación, el refuerzo de la cultura corporativa y el descubrimiento de nuevas habilidades, junto con un buen salario y buenas condiciones laborales suele tener un impacto positivo directo en la retención del talento. Después de todo, un empleado que se siente valorado, comprendido por sus superiores, motivado y conectado con sus compañeros difícilmente buscará otras oportunidades fuera de la empresa, porque la organización ya le da todo lo que busca. Por descontado, el team building no debe entenderse como una actividad puntual, sino como una herramienta estratégica integrada en la gestión de los recursos humanos. Tal y como nos han remarcado desde Viviendo del Cuento, “invertir en experiencias que refuercen al equipo es invertir en el futuro de la organización”. Así que no lo pienses más y dale a tu equipo de trabajo lo que realmente necesita.