La reaparición de Puigdemont en Barcelona causa revuelo y activa operativos policiales
Tras casi siete años en el extranjero y pese a la orden de detención nacional contra él, el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha reaparecido en Catalunya. “He venido aquí para recordarles que aún estamos aquí”, declaró en el paseo Lluís Companys de Barcelona durante un acto organizado por el Consell de la República. Minutos después, desapareció mientras la comitiva se dirigía al Parlament para asistir a la investidura de Salvador Illa.
La aparición de Puigdemont ha generado caos en Barcelona, con los Mossos d’Esquadra activando la ‘operación jaula’ para localizar y detener al político. Patrullas han revisado vehículos en los accesos y salidas de la ciudad, prestando especial atención a los coches que cruzaban entre Barcelona y L’Hospitalet de Llobregat. La situación ha causado tensiones entre manifestantes y la policía.
Reacciones políticas y operativos en curso
El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha criticado la reaparición de Puigdemont, calificándola de “patochada de teatro” y reclamando el cumplimiento del Estado de Derecho. Mientras tanto, el abogado de Puigdemont, Gonzalo Boye, y el exsenador de Junts, Jami Matamala, han salido del recinto del Parlament tras el discurso de investidura de Illa.
En redes sociales, figuras públicas como Jordi Évole han comentado jocosamente la situación, comparándola con la serie “Lupin” de Netflix. Los Mossos han confirmado que Puigdemont sigue en paradero desconocido, y los controles en carreteras catalanas continúan intensificándose.
La situación en el Parlament y la respuesta de los Mossos
Momentos de tensión se han vivido ante la Ciutatella, con enfrentamientos entre los Mossos y los manifestantes. El uso de gas pimienta y porras por parte de la policía ha exacerbado los ánimos de los congregados, quienes esperaban la llegada de Puigdemont al Parlament.
Salvador Illa, durante su discurso de investidura, ha pedido la aplicación ágil de la ley de amnistía y ha expresado su voluntad de trabajar para restablecer los derechos políticos de todas las formaciones. Mientras tanto, los seguidores de Junts y del ‘expresident’ especulan sobre su posible regreso a Francia para burlar a las autoridades.