Pueblos Vivos Cuenca ha denunciado que la Junta de Castilla-La Mancha ha iniciado la tramitación de una nueva macrogranja de 1.995 cerdos en el municipio de Carboneras de Guadazaón. Al ser esta instalación menor de 2.000 cabezas, se tramita bajo el procedimiento de Evaluación Ambiental Simplificada, lo que, según la organización, implica un estudio menos riguroso y exhaustivo en comparación con la Evaluación Ambiental Ordinaria.
El proyecto, presentado por la empresa Ficaporc S.L., planea ubicar la macrogranja entre los términos de Carboneras y Pajarón. Según los datos del proyecto, la instalación tendrá un consumo anual de 4,9 millones de litros de agua y generará 4,3 millones de litros de purín, el cual se verterá en las fincas de la zona.
Pueblos Vivos Cuenca ha destacado que en el término municipal de Carboneras ya existen cuatro macrogranjas porcinas, que suman un total de más de 17.000 cabezas de cerdo. Si se lleva a cabo esta nueva macrogranja, se estima que la población de Carboneras de Guadazaón, que cuenta con 787 habitantes, tendría un promedio de 24 cerdos por habitante. Además, la misma empresa, Ficaporc S.L., está tramitando otra macrogranja en la localidad vecina de Pajarón, con una capacidad proyectada para 4.300 cerdos de cebo.
La organización también ha puesto de relieve la problemática de la calidad del agua en la zona, ya que la captación original del municipio en la fuente de Villar de Cañas tuvo que ser cambiada debido a la contaminación por nitratos. Actualmente se utiliza una fuente que mezcla agua de un pozo entubado y un manantial, según datos del Sistema Nacional de Aguas de Consumo. Sin embargo, las analíticas todavía indican niveles preocupantes de nitratos en el agua, como los 43 miligramos por litro registrados en julio de 2022, a pesar de que el umbral de potabilidad se establece en 50 mg/l.
Pueblos Vivos Cuenca alerta sobre la carga ganadera en la zona, enfatizando que es habitual que los promotores soliciten licencias para macrogranjas que no superan las 2.000 cabezas con el fin de eludir una evaluación ambiental más exhaustiva. Este hecho se vuelve preocupante, dado que una de las macrogranjas en Carboneras, que comenzó con 1.992 cabezas en 2014, ahora ofrece 6.968 plazas de cebo.
Con esta situación, la organización vecinal exige que el proyecto se tramite bajo una evaluación ambiental ordinaria, tal y como permite la Ley de Evaluación Ambiental de Castilla-La Mancha, cuando se presentan efectos sinérgicos con otras instalaciones o se identifican riesgos ambientales significativos como la contaminación por nitratos.
Pueblos Vivos Cuenca ha señalado que el término municipal de Carboneras de Guadazaón presenta una carga excesiva de ganadería industrial, lo cual ya está afectando la calidad de sus aguas subterráneas. Medidas de la Red Ciudadana de Vigilancia de Nitratos en la zona han detectado niveles superiores a los 50 mg/l. Por ello, la organización solicita a la Junta de Castilla-La Mancha que declare la zona como vulnerable a nitratos.
De acuerdo con datos del Registro Ganadero, los términos municipales de Carboneras de Guadazaón, Reíllo y Pajarón suman un censo porcino de más de 28.500 cabezas de cerdo en un radio de 5 kilómetros. La implementación de las nuevas macrogranjas en Carboneras y Pajarón llevaría el censo total a 34.737 cerdos.
