El Gobierno de Castilla-La Mancha ha llevado a cabo este jueves en Toledo las VII Jornadas ‘Línea de Vida en la Atención a la Infancia y la Adolescencia’. Este evento se ha consolidado como un referente para los profesionales que trabajan en la protección y el bienestar de la infancia y la adolescencia en la región. Más de 180 profesionales se han inscrito en este encuentro, que promueve la formación y el intercambio de experiencias, impulsado por el Ejecutivo autonómico en colaboración con la Federación de Municipios y Provincias.
Las jornadas se desarrollan en un contexto crucial, donde se destaca la firme apuesta del Gobierno regional por fortalecer los Servicios Sociales de Atención Primaria. Esto se enmarca dentro de la Ley Orgánica de Protección Integral a la Infancia y la Adolescencia frente a la Violencia (Lopivi) y su implementación en Castilla-La Mancha. La consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, ha subrayado la complejidad de los casos que se gestionan y ha agradecido la dedicación de los profesionales que asisten a estas jornadas, enfatizando su compromiso por seguir actualizándose y compartiendo conocimientos con el objetivo de mejorar la calidad de vida de los menores.
En el contexto de esta normativa, el Gobierno regional ha creado 24 equipos Lopivi distribuidos por el territorio, compuestos por 48 profesionales especializados en diversas áreas como psicología, trabajo social y educación social. Estos equipos están diseñados para reforzar las acciones realizadas por los servicios locales de atención primaria. La consejera ha explicado que estos profesionales intervienen en los municipios, trabajando directamente con familias y niños desde el nacimiento hasta la edad adulta, abordando diversas circunstancias que puedan surgir.
Se estima que este nuevo modelo se encuentra en fase de pilotaje en 437 municipios, contando con la participación de 350 profesionales. Esta iniciativa se presenta como una experiencia sin precedentes que permitirá evaluar su efectividad y perfeccionar su aplicación definitiva para el año 2026. Además, ha sido elaborado un nuevo manual de intervención familiar, destinado a ser una herramienta de trabajo conjunta entre las administraciones, que aporta coherencia y rigor en los casos de vulnerabilidad, riesgo o desamparo.
Durante la jornada, se ha resaltado la necesidad de que los profesionales actualicen constantemente sus conocimientos para hacer frente no solo a los desafíos tradicionales en la intervención social, sino también a las nuevas amenazas que surgen, como el mal uso de las redes sociales y la irrupción de la inteligencia artificial. La consejera ha enfatizado que «no podemos bajar la guardia en la protección de la infancia», destacando la relevancia de una intervención solidaria y comprensiva.
Con este enfoque integral y preventivo, el Gobierno de Castilla-La Mancha reitera su compromiso con la protección, el acompañamiento y la atención de la infancia, garantizando que los menores puedan crecer en entornos seguros y con las oportunidades necesarias para su desarrollo personal y social.
