Castilla-La Mancha sigue dando pasos en la modernización de la sanidad pública mediante la incorporación de la tecnología de la información a la gestión documental de la historia clínica en los hospitales del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM).
Así lo ha manifestado este sábado el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, durante una visita al Hospital de Valdepeñas (Ciudad Real), donde acaba de completarse el proceso de digitalización de la historia clínica. “En este hospital no se genera papel desde septiembre y los documentos de pruebas diagnósticas y consentimientos informados que se generan en papel se quedan digitalizados en menos de 24 horas”, ha subrayado.
Para realizar esta labor, se ha contado con un equipo de profesionales coordinados para garantizar la trazabilidad de las historias clínicas y de todo el proceso de digitalización. El consejero ha agradecido a estos profesionales, el trabajo realizado durante todo un año para eliminar toda la documentación clínica en papel.
La digitalización dota a los profesionales de un mecanismo ágil y funcional que facilita su actividad asistencial, ha subrayado el consejero de Sanidad, ya que les permite accede a los datos del paciente y los resultados de las pruebas diagnósticas desde el momento de su realización.
Algunos ejemplos de pruebas digitalizadas son audiometrías, biometrías, electrocardiogramas, ergometrías, espirometrías, estudios del sueño, holter cardiaco y tensional, así como todos los consentimientos informados necesarios para cada procedimiento e intervenciones quirúrgicas.
El Hospital de Valdepeñas se suma así al proceso que ya comenzó también en la provincia el Hospital General Universitario de Ciudad Real en 2016 a raíz de la migración a Mambrino XXI, el sistema de historia electrónica del SESCAM.
Desde entonces, el equipo de Documentación Clínica y Archivo del Hospital de Ciudad Real ha pasado de papel al formato electrónico unas 130.000 historias clínicas, ha explicado el responsable de Sanidad, quien ha estado acompañado de los gerentes de las áreas de Valdepeñas y Ciudad Real, Damián Aranda y Alberto Jara, respectivamente, junto al delegado de Sanidad, Francisco José García.
“Así, en Valdepeñas se han dejado de mover una tonelada de papel diaria y en Ciudad Real cinco” ha explicado el consejero para mayor beneficio de celadores y profesionales del archivo.
La conversión digital en Ciudad Real
En el caso del Hospital General Universitario de Ciudad Real, tras finalizar una primera fase del proceso de digitalización que consistió en el “envío cero” de historias físicas a las unidades de consultas y hospitalización, el pasado mes de diciembre instauró una segunda fase de trabajo sobre estandarización del envío de documentación clínica desde el archivo a los quirófanos.
Según ha manifestado el consejero de Sanidad, esta segunda parte del proyecto “era fundamental realizarla minuciosamente dada la trascendencia de los pacientes que iban a intervenirse quirúrgicamente”. El objetivo, ha señalado, era dejar de servir dosieres al bloque quirúrgico y cumplir con la finalidad de “envío cero” de historias clínicas en papel a todas las unidades de la Gerencia de Ciudad Real.
De forma paralela, también se ha creado a petición del archivo del Hospital de Ciudad Real una aplicación dentro de la historia clínica electrónica para realizar peticiones urgentes de historias físicas, que por algún motivo estrictamente necesario, requieran de su entrega en alguna unidad.
Este aplicativo permite conocer en todo momento la trazabilidad de la historia, en definitiva, quién ha realizado la petición y dónde se ha servido la misma, dando mayor seguridad al proceso de tramitación y gestión de los dosieres clínicos.