Cooperativas Agroalimentarias en Castilla-La Mancha ha pronosticado una cosecha de 17,8 millones de hectolitros de vino y mosto para la campaña de vendimia 2023/24, lo que supone un 22% menos que el año pasado. Las provincias de Albacete, Cuenca y Toledo serán las más afectadas, con una merma cercana al 30%, mientras que Ciudad Real registraría una disminución del 10%. A pesar de este descenso, la variedad Airén ha presentado un resultado algo mejor debido al paso de DANA, aunque ha experimentado una disminución en torno al 10% y 15%.
A nivel nacional, se espera que la producción vitivinícola en España alcance los 33 millones de hectolitros de vino y mosto, lo que representa una disminución del 20% en comparación con el año anterior. Francia ha ajustado su pronóstico a 44,96 millones de hectolitros, mientras que Italia reclama ayuda debido a enfermedades criptogámicas que han disminuido su cosecha. En total, la Unión Europea ha experimentado una disminución de casi 13 millones de hectolitros, junto con otros 7 millones de hectolitros menos producidos en el hemisferio sur.
Estas cifras globales indican que habrá una menor disponibilidad mundial de vino en comparación con años anteriores. A pesar de esto, se espera un punto de inflexión en el mercado que se traduzca en un aumento de las operaciones y un incremento en el valor de las existencias acumuladas de la campaña anterior. La comisión sectorial de vinos de Cooperativas Agroalimentarias Castilla-La Mancha prevé que las cotizaciones de los productos transformados vitivinícolas se recuperen gracias a este escenario de mayor optimismo y menor presión en la oferta.
En conclusión, es importante destacar que se espera una cosecha de vino y mosto más reducida en la región de Castilla-La Mancha y a nivel mundial. Sin embargo, existe la posibilidad de una recuperación en el mercado y un aumento en el valor de los productos transformados vitivinícolas debido a las condiciones actuales.
