El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha expresado su satisfacción con relación a las últimas estadísticas de desempleo en la Comunidad Autónoma, las cuales se dieron a conocer al concluir el mes de junio. Durante su intervención en un evento realizado en Airbus Albacete, García-Page no ha ocultado su contento ante lo que ha calificado como “un nuevo récord” en la disminución del paro.
“Hoy es un buen día para Castilla-La Mancha. Estamos de enhorabuena”, afirmó el presidente, evidenciando una perspectiva positiva respecto al futuro laboral de esta Comunidad Autónoma. Su declaración parece reflejar un panorama esperanzador para la región en cuestión de empleo.
Sin embargo, García-Page ha sido realista al reconocer que Castilla-La Mancha parte de una situación menos ventajosa en comparación con otras regiones: “Como región, viene de un poco más atrás”. Este comentario hace alusión a los retos enfrentados por la comunidad en el ámbito laboral, en particular a lo que él describe como una “época de hachazos rotundos”, posiblemente en referencia a periodos de cursos políticos y económicos marcados por medidas austeras o decisiones drásticas que pudieron haber afectado el empleo.
El presidente concluyó su discurso enfatizando la necesidad de la Comunidad Autónoma de acelerar su progreso: “Necesitamos crecer un poco más deprisa”. Esta declaración subraya la importancia de continuar trabajando para fortalecer la economía regional y mejorar las tasas de empleo, apuntando hacia una gestión que continúa enfrentando el desafío de rebajar el desempleo y generar más oportunidades laborales para sus ciudadanos.
