Eva Murati, presentadora de la Champions League en Albania, ha denunciado el constante acoso que sufre en redes sociales por su apariencia. A pesar de su exitosa carrera en televisión, la comunicadora sigue enfrentando críticas que poco tienen que ver con su labor profesional
Eva Murati, presentadora de la Champions League en Albania, ha denunciado el acoso constante que recibe en redes sociales por su apariencia. A pesar de su destacada trayectoria en televisión, sigue siendo blanco de comentarios despectivos que poco tienen que ver con su trabajo. La comunicadora ha utilizado sus plataformas para hablar abiertamente sobre la discriminación que enfrentan las mujeres en el ámbito mediático.
“Desde que comencé en televisión a los 17 años, he lidiado con insultos y ataques en redes sociales. Con el tiempo entendí que mi valor no depende de lo que digan los demás”, comentó en un video publicado en TikTok. Sus palabras han resonado con muchas mujeres que enfrentan situaciones similares en la industria del entretenimiento.
La brecha de género en el mundo de la televisión
Murati señala que las mujeres en los medios son juzgadas con un estándar distinto al de los hombres. Mientras que a sus colegas masculinos se les valora por su talento y desempeño, ella y muchas otras son criticadas por detalles irrelevantes como su vestimenta, peinado o maquillaje. “Es absurdo que cuestiones superficiales sigan teniendo tanto peso en nuestra credibilidad profesional”, afirmó.
El debate sobre el sexismo en la televisión no es nuevo, pero testimonios como el suyo vuelven a poner el tema sobre la mesa. Muchas presentadoras y periodistas han denunciado que enfrentan comentarios que van desde críticas estéticas hasta amenazas e insultos en redes sociales, lo que refleja una desigualdad arraigada en la industria.
Una carrera consolidada más allá de la televisión
Además de su trabajo en la Champions League, Murati ha explorado otros ámbitos del entretenimiento. Ha trabajado en cine, televisión y publicidad, consolidándose como una figura influyente en Albania. Ha participado en varias producciones cinematográficas, presentado certámenes como Finding Miss Universe Albania y trabajado en campañas de marcas reconocidas, incluyendo la Eurocopa 2012 y 2016.
El impacto de su testimonio va más allá de su experiencia personal. Al hablar abiertamente sobre este problema, refuerza la necesidad de un cambio estructural en los medios de comunicación. Las mujeres que trabajan en la industria del entretenimiento deben ser valoradas por su talento y profesionalismo, no por su apariencia. Su mensaje resuena en una era donde la lucha por la igualdad sigue siendo un desafío. Sus palabras no solo visibilizan el problema, sino que invitan a la reflexión sobre cómo la sociedad sigue tratando a las mujeres en espacios públicos.
