El pleno de las Cortes de Castilla-La Mancha celebró el pasado jueves un debate general sobre la situación del cultivo del azafrán, donde la oposición coincidió en la necesidad de implementar políticas que protejan este producto emblemático y fomenten el relevo generacional. Sin embargo, estas propuestas fueron rebatidas por el PSOE, que criticó a la oposición por demandar más fondos mientras se oponían a unos presupuestos que instan a reducir impuestos.
Luis Blázquez, diputado de Vox, abrió el debate subrayando la importancia del azafrán, un cultivo que es parte del patrimonio cultural de Castilla-La Mancha y un elemento valioso de la gastronomía local e internacional. Blázquez destacó que la tradición de cultivar azafrán se transmite de generación en generación, pero actualmente enfrenta serias dificultades que amenazan su viabilidad. Mencionó la competencia desleal, donde azafrán de inferior calidad y a precios bajos confunde a los consumidores, lo que crea una constante lucha por mantener la rentabilidad de las explotaciones.
El parlamentario de Vox argumentó que se está permitiendo la entrada de productos que no cumplen con los estándares exigidos a los agricultores locales, lo que genera un sentimiento de desamparo debido a la falta de protección a la economía de la región. Para abordar estos problemas, pidió un programa de subsidios para insumos agrícolas, inversión en investigación y mejoras en sistemas de riego, así como un fortalecimiento de la presencia del azafrán en mercados internacionales.
Santiago Lucas Torres, diputado del PP, también se pronunció durante el debate y describió el azafrán como «oro en polvo». Sostuvo que muchos productores están abandonando este cultivo vital, a pesar de su alta demanda internacional. Lucas Torres alertó sobre los altos costes de producción, que oscilan entre 12.000 y 15.000 euros por hectárea anualmente, y cómo los precios del mercado, que varían entre 3.000 y 8.000 euros el kilo, no siempre logran compensar esa inversión.
El PSOE, a través de Antonio Sánchez Requena, criticó la postura de la oposición. Requena argumentó que resulta contradictorio exigir ayudas mientras se rechazan presupuestos que podrían facilitar esas solicitudes. En su intervención, recordó las peticiones de ambos grupos de recortar partidas esenciales para la promoción de productos agroalimentarios, lo que, a su juicio, contradice sus demandas actuales.
Respecto a las propuestas de resolución, la iniciativa de Vox no prosperó, mientras que el PP presentó sugerencias para mejorar la sanidad de los cormos de azafrán y desarrollar técnicas de cultivo más sostenibles. Finalmente, gracias a su mayoría, el PSOE logró aprobar su propuesta que incluía el compromiso de continuar apoyando al sector del azafrán y reforzar el trabajo con grupos operativos relacionados con este cultivo.
