El pleno del Ayuntamiento de Ciudad Real ha aprobado, con los votos a favor de PP y Vox y el voto en contra del PSOE, la modificación de la tasa por la gestión de residuos sólidos urbanos. El portavoz del equipo de Gobierno, Guillermo Arroyo, ha presentado un informe de la tesorera del Ayuntamiento, donde se asegura que el coste del servicio de recogida de basura para los ciudadanos está correctamente calculado, y que el famoso «tasazo o basurazo de Pedro Sánchez está incluido solo una vez».
Arroyo ha anunciado que en las próximas semanas se creará una comisión de trabajo de tesorería con el objetivo de adaptar la ordenanza de basuras para 2026 y considerar bonificaciones para todas las familias de Ciudad Real, con el fin de mitigar la subida de impuestos impuesta por el Gobierno central. Por su parte, el PSOE ha criticado la decisión del equipo de Gobierno de desestimar su alegación, que solicitaba revisar los cálculos, lo que ha resultado en un aumento del 17% del recibo de basura para 2025.
Además, el pleno ha aprobado, nuevamente con el respaldo de PP y Vox y la abstención de los grupos opositores, la ordenanza que regula los instrumentos de control de la legalidad en la actividad urbanística y ambiental del Ayuntamiento. Esta ordenanza también establece la obligación de utilizar medios electrónicos para la inscripción en pruebas selectivas de acceso al empleo público.
En otro tema, la mayoría de PP y Vox rechazó la moción del PSOE para recuperar la Unidad de Violencia de Género. La concejal de Igualdad, María José Escobedo, insistió en que esta unidad no ha sido eliminada, sino que su enfoque debe centrarse en las víctimas. La portavoz socialista, Sara Martínez, propuso un pacto al Partido Popular para desmarcarse de Vox en este asunto, asegurando que se comprometería a abstenerse del proyecto de presupuesto si se restauraba la unidad y se devolvían las competencias plenas a su concejalía.
El pleno también vio el rechazo de otras iniciativas, como la de Ciudadanos para mejorar la accesibilidad y el paisaje urbano en el centro de Ciudad Real, así como una moción del PSOE para erradicar actitudes y discursos racistas en el Ayuntamiento. Los socialistas denunciaron la postura del PP, que votó en contra de una ciudad libre de racismo, lo que fue contrarrestado por Vox al criticar la «incoherencia» del PSOE sobre los derechos humanos, citando su relación con dictaduras y desconociendo la realidad de la inmigración.
Por último, el pleno aprobó varias declaraciones institucionales en solidaridad con los afectados por la DANA (Depresión Aislada en Niveles Altos) y en defensa de la infancia. Todos los grupos acordaron mostrar su firme compromiso en la defensa de los derechos de propiedad industrial y en la lucha contra las falsificaciones, y el Ayuntamiento se adherirá a la Red Europea de Autenticidades mediante un convenio con la Oficina Española de Patentes y Marcas.
