El vicepresidente segundo de las Cortes de Castilla-La Mancha, Santiago Lucas-Torres, ha advertido de que la situación de la lana se ha convertido en un grave problema para los ganaderos de la región. Durante su intervención, Lucas-Torres ha destacado que su grupo ha presentado una Proposición No de Ley (PNL) para buscar soluciones que ayuden al sector, ya que los precios en mercados internacionales, como China e India, han caído drásticamente y la competencia de las fibras sintéticas ha convertido la lana en un residuo que nadie quiere recoger.
El portavoz del partido ha lamentado que a diferencia de otras regiones de España, donde se han implementado programas efectivos para la recogida y reutilización de la lana, en Castilla-La Mancha la Consejería ha fracasado en este aspecto. Según sus palabras, esto ha llevado a que toneladas de lana se acumulen, lo que no solo ocupa espacio, sino que también plantea un problema ambiental y de bioseguridad.
Para abordar esta situación, los ‘populares’ han propuesto la reutilización de la lana acumulada, sugiriendo su uso como material contra incendios en vertederos. “No entendemos que la Junta esté haciendo caso omiso”, ha subrayado Lucas-Torres, a la vez que ha propuesto la creación de un servicio gratuito de recogida de lana. Este servicio, inspirado en modelos exitosos de otras comunidades autónomas, no solo aliviaría la acumulación de este residuo, sino que también fomentaría su reutilización, contribuyendo a la sostenibilidad y bioseguridad de las explotaciones ganaderas.
Además, Lucas-Torres ha criticado la «inacción» del PSOE de Castilla-La Mancha en lo que respecta a la retirada de cadáveres de animales de explotaciones ganaderas. Ha señalado que «es inaceptable que en pleno siglo XXI los ganaderos de Castilla-La Mancha estén enfrentándose a un problema tan básico como es la recogida de animales muertos”. Según él, la empresa encargada ni ha aparecido ni se espera su llegada, lo que ha llevado a que durante todo el verano los cadáveres se acumulen, creando una potencial «bomba de tiempo sanitaria y ambiental».
El vicepresidente segundo también ha planteado preocupaciones sobre las posibles consecuencias sanitarias que esto podría tener, especialmente en relación con la propagación de enfermedades, como la gripe aviar, a través de aves migratorias. «¿Qué pasará con la sanidad del resto de los animales de las explotaciones o con los habitantes de las zonas afectadas?», se preguntó Lucas-Torres, enfatizando la gravedad de la situación.
Entre otras críticas, ha mencionado el incumplimiento de Agroseguro en términos de coberturas e indemnizaciones, lo que ha dejado a los ganaderos en una situación de indefensión y desprotección económica. Además, ha señalado la «alarmante desidia» en la gestión de subvenciones, las cuales deberían servir como un salvavidas para los ganaderos, pero han sido manejadas de tal manera que ponen en riesgo la supervivencia de muchas explotaciones en la región.