TVE reveló el pasado martes la lista de los 16 artistas que pugnarán por representar a España en Eurovisión 2024 en el Benidorm Fest, excluyendo a Víctor Sandoval y Marta Riesco. Su no selección despertó controversia que fue a más en el plató de ‘Ni que fuéramos’, donde un debate sobre su calidad musical derivó en un enfrentamiento que se salió de control. Sandoval, vestido de faraón y blandiendo un cetro, confrontó al periodista Juanma Fernández y a Riesco con tal vehemencia, que la tensión escaló rápidamente.
La discusión llegó a tal punto que Riesco exigió la expulsión de Sandoval, quien respondió con comentarios que la audiencia y sus colegas calificaron de inaceptables. El incidente provocó un clamor en redes sociales por la expulsión de Sandoval del programa. Ante la presión, Sandoval terminó abandonando el plató, aunque después volvió para ofrecer disculpas, argumentando que su intención nunca fue ofender y admitiendo no sentirse bien con la situación generada.
Los compañeros en el plató, junto con la dirección del programa, condenaron la actitud de Sandoval, reafirmando su compromiso contra el machismo y la violencia de género. El incidente destapó una vez más el debate sobre los límites del espectáculo en televisión y la responsabilidad de los medios de combatir la discriminación y promover un ambiente de respeto y tolerancia. La cadena y el programa, pese a distanciarse de las declaraciones de Sandoval, afrontan ahora el desafío de gestionar las consecuencias de este episodio y asegurar que tales comportamientos no se repitan.
