En un suceso que ha conmocionado a la sociedad alemana, un antiguo solicitante de asilo afgano, identificado como autor de un ataque mortal con cuchillo en un parque de Aschaffenburg, en el sur de Alemania, podría ser declarado inimputable de acuerdo a las conclusiones presentadas por peritos forenses. Ocurrido en enero, el ataque dejó como saldo un niño de dos años de origen marroquí y un adulto muertos, además de varios heridos, incluida una niña de origen sirio en estado grave.
Según fuentes oficiales, el acusado, un afgano de 28 años, enfrenta serias dudas sobre su capacidad para comprender la naturaleza reprochable de sus actos debido a una enfermedad psiquiátrica. Marco Schmitt, portavoz de la fiscalía de Aschaffenburg, ha confirmado que, dadas las circunstancias, el acusado podría no ser capaz de responder penalmente por sus acciones, aunque sigue pendiente de confirmación final dado que las investigaciones aún no han concluido.
El incidente, que se produjo el 22 de enero, causó una profunda impresión no sólo por sus víctimas — incluidos niños de una escuela infantil en excursión — sino también por la valentía de los transeúntes que intentaron detener al agresor a costa de su propia seguridad. Una educadora y un hombre de 72 años fueron algunos de los que sufrieron heridas graves durante el intento de detener al atacante.
Este individuo, cuya solicitud de asilo había sido previamente rechazada, estaba comprometido a dejar Alemania tan pronto como recibiera la documentación necesaria del consulado afgano, crítica que ha reavivado el debate sobre la política migratoria en el país. Se ha descubierto que el sospechoso había sido internado varias veces por problemas psiquiátricos graves y había mostrado comportamiento agresivo previamente dentro de la comunidad de solicitantes de asilo con la que convivía.
El acto violento no solo dejó un rastro de dolor entre las familias afectadas y la comunidad de Aschaffenburg, sino que también ha tenido repercusiones significativas en el ámbito político alemán. El suceso fue un tema crucial en la campaña electoral a las elecciones generales del 23 de febrero, en las que el enfoque hacia la restricción migratoria y el aumento de la seguridad pública se intensificó, culminando en la victoria del bloque conservador liderado por Friedrich Merz.
Mientras Alemania se enfrenta al espejo de su política migratoria y de asilo, la tragedia de Aschaffenburg destapa las complicaciones inherentes al tratar de equilibrar la humanidad con la seguridad, un dilema que, sin duda, seguirá generando debate.
