Fundada hace apenas unos meses y empezando con un capital inicial de 5.000€ en la ciudad manchega de Toledo, Pepper nace con el empeño de ofrecer ropa de alta calidad y con la atención al cliente como uno de sus pilares.
“El cliente es el único factor imprescindible para nosotros por encima de mí y de cualquiera. No tratamos solo de atraer clientes, intentamos que se queden a vernos crecer y que nos acompañen de la mano durante mucho tiempo” dice Darío, fundador de la marca. Y es que para ellos la excelencia en la atención al cliente es un factor que nunca puede fallar o no tendrán el crecimiento esperado.
“Intentamos mostrarnos lo más transparentes posible ya que no tenemos nada que esconder. Apostamos por los tejidos de más alta calidad y nuestra producción se queda en casa, en España. Por ello mostramos todo el proceso de fabricación en un video que tenemos colgado en nuestra web”
En los tiempos que corren y con una crisis sanitaria y económica como la actual por el COVID-19 la estrategia de Pepper es clara, van a aprovechar para dar más valor añadido al producto y trabajar más si cabe en la fidelización de sus clientes.
“La situación económica no es nada fácil y menos cuando acabas de empezar, pero esto no ha hecho más que duplicarnos las ganas de seguir mejorando. Estamos trabajando en reducir los tiempos de entrega del producto a no más de 24h, mejoras en el packaging y un pequeño salto en la calidad del producto que lo veremos con la nueva colección. Por esto nuestros márgenes se verán afectados, pero en tiempo de crisis no hay mayor salvoconducto para una empresa que la fidelidad de sus clientes y es en lo que estamos centrados en estos momentos”
A parte, Pepper, tiene un marcado carácter social y a lo largo de la pandemia ha llevado a cabo una campaña de crowdfunding junto a otras marcas para la compra de material sanitario.
Pepper tenía previsto haber lanzado a finales de marzo su colección de primavera-verano, sin embargo, al ser producción 100% española, van a tener que esperar a que se reanude la actividad poder mostrar sus nuevos diseños.
La situación es complicada sin embargo, qué bonito es ver cómo una empresa a pesar de todos los contratiempos, lucha por lo que creó y lo más importante, se mantiene con la misma ilusión que cuando nació.