Según una publicación del diario ‘El Mundo’, los expresidentes del FC Barcelona, Josep Maria Bartomeu y Sandro Rosell, reconocieron haber realizado pagos al vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros, José María Enríquez Negreira, con el fin de proteger al club de su chantaje y garantizar «neutralidad» en los arbitrajes. Afirman que no quisieron romper antes con Negreira porque mantenía falsas acusaciones sobre el club y no querían que se convirtiera en un gran escándalo público. La información también destaca una reunión entre Joan Laporta y Joan Gaspart en 2004, en la que hablaron de la necesidad de mantener peso en la Federación, en la que Negreira era vicepresidente del CTA. Los antiguos presidentes también indican que estos pagos se han llevado a cabo por otros equipos de Primera y Segunda División, y se quejan de que solo se está actuando contra el Barcelona cuando es una conducta común en el fútbol español.
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