En un giro inesperado que ha sacudido los cimientos de GH Dúo 3, Javier Mouzo, concursante de la presente edición, ha decidido abandonar el reality show de Telecinco, poniendo fin a su participación de una forma tan drástica como sorprendente. Esta decisión llega una semana después de que expresara en el programa su deseo de dejar la competencia, citando la añoranza por su esposa como principal motivo.
Los eventos que condujeron a esta salida abrupta comenzaron a desencadenarse durante la tarde del jueves en Guadalix de la Sierra, cuando, según narró María Jesús Ruiz, un grito desde fuera de la casa irrumpió con un mensaje que dejaría perplejos tanto a concursantes como a espectadores: “Javi, quédate. Vanessa te ha dejado”. Este mensaje se produjo poco después de un comunicado contundente por parte de Vanessa Bouza, su esposa, a través de sus redes sociales, anunciando el fin de su matrimonio. Bouza explicitó su incomodidad con la cercanía entre Mouzo y Maica Benedicto en el programa, cuyo trato afectuoso hacia Mouzo, referido como “mi bastón”, junto con las constantes indecisiones del concursante acerca de su permanencia en el show, fueron señaladas como faltas de respeto hacia la organización.
A diferencia de ocasiones anteriores, esta vez la producción no mostró clemencia hacia Mouzo, confirmando su salida del concurso de forma oficial al inicio de la sexta gala. La conversación previa con el presentador Carlos Sobera no solo sirvió para anunciar su partida sino también para cuestionar su comportamiento durante su paso por Gran Hermano, siendo esta su segunda participación y su segundo abandono.
La decisión de Mouzo de abandonar se produce en un contexto donde su estabilidad emocional dentro de la casa ya mostraba signos de desgaste, manifestándose en un rendimiento desganado en las pruebas y un bajo perfil en sus interacciones diarias con el resto de los concursantes. Aun así, su salida se da apenas días después de haber sido salvado de la expulsión por el público, agregando una capa más de complejidad y controversia a su partida.
Mientras tanto, Vanessa Bouza ha llevado su descontento a la arena pública, expresando abiertamente su frustración no solo con la intimidad observada entre su ahora exesposo y Benedicto, sino también con la actitud ambivalente de Mouzo hacia el programa. Mouzo, por su parte, solo atinó a disculparse con el equipo y la audiencia por su doble retirada, aún bajo el impacto de las circunstancias que rodearon su decisión.
Estos acontecimientos dejan una huella indiscutible en la historia de GH Dúo 3, subrayando una vez más cómo la presión del entorno televisivo, combinada con las dinámicas personales y relaciones externas, puede influir de manera decisiva en el curso y desenlace de la competencia.
