Compartimos con ustedes, este artículo de opinión de María Ángeles Ramos sobre la Ley de Memoria Histórica y la decisión tomada por el alcalde de Palma de Mallorca.
La multiusos Ley de Memoria Histórica
PSOE, Podemos y Mes per Mallorca se han visto en la obligación de tejer una gruesa cortina que tape las desvergüenzas de su gestión en la isla, especialmente sobre su proceder con la explotación de menores tuteladas. Y, para ello, las únicas herramientas que han traído consigo, son el odio, el rencor y la mentira.
La maquinaria, ya la conocemos, la multiusos Ley de Memoria Histórica, fabricada por los muñidores de la desintegración de España y debidamente cuidada por los acomplejados guardianes del “estatus quo” diseñado desde cuentas “off shore”. Y ni tan siquiera traen el libro de instrucciones, pues lo que ya ha quedado patente es que esto de leer y cultivarse les produce urticaria.
Toledo es historia en sí
Toledo, ciudad milenaria, patrimonio de la humanidad, por obra y arte de estos expoliadores de la verdad, se ha convertido de un día para otro, en un símbolo del franquismo, pues el General Francisco Franco tomó la decisión de salvar de una muerte segura a 1.800 toledanos, entre ellos 50 niños y 500 mujeres, que resistían los fuertes envites de los republicanos allá por 1.936, en el Alcázar toledano. Pocos parecen si los comparamos con los millones de personas nacidas en nuestra ciudad a lo largo de su historia, como para utilizarlo como excusa para crear tensiones entre regiones.
Siendo el Alcázar una parte muy importante de la ciudad, Toledo es más que su Alcázar, su Al-Qasr o su Castrum Romano, Toledo es historia en sí.
Desde el asentamiento en el cerro del Bu entre 1.800-1.200 a.C., pasando por ser enclave principal Carpetano en los siglos tercero y cuarto antes de Cristo, posteriormente ciudad romana, que contaba con un circo para 30.000 espectadores, desde el año 192 a.C. y capital Visigoda en el siglo sexto, con Leovigildo. Musulmana más tarde hasta 1.805 cuando Alfonso VI la incorpora al Reino de Castilla, convirtiéndola en su capital, hasta 1561 cuando Felipe II traslada la corte a Madrid.
Necedades como retirar el nombre de la Calle Toledo, amparados en la Ley de Memoria Histórica
Querer reducir la historia milenaria de Toledo a 70 días vividos hace 85 años habla claro sobre las intenciones de estos indocumentados cuyo fin último es extender el odio por toda la geografía española. Su único objetivo es crear un clima propicio para desintegrar nuestra nación y por el camino quedarse con las migajas resultantes, para su uso y disfrute personal sin injerencias ni interferencias del poder judicial, sumiendo a la población en general en la miseria y el hambre.
Necedades como retirar el nombre de la Calle Toledo, amparados en la Ley de Memoria Histórica, avivando odios ya superados por el conjunto de los ciudadanos, para la consecución de fines personalísimos, deberían ser perseguidos judicialmente.
Instamos a Sánchez a que se derogue la Ley de Memoria Histórica
Rodríguez Zapatero, el oscuro personaje amigo de narcodictaduras, fue quien dio a luz a este engendro de Ley, claramente sectaria desde su origen, mantenida por el equidistante Rajoy y prostituida en grado sumo durante el mandato de Sánchez, que lleva sirviendo de tapadera ideológica a los partidos de izquierda, que son incapaces de gestionar de manera eficiente los recursos que tienen a su disposición para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y que sistemática y recurrentemente tienen que ocultar sus despropósitos.
El Grupo Municipal VOX, exige la inmediata rectificación de la decisión tomada por el alcalde de Palma de Mallorca y que pida perdón a todos los toledanos. Además, instamos a Sánchez a que se derogue la Ley de Memoria Histórica.
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