El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha comentado la reciente afirmación del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en relación con el Partido Popular, sugiriendo que este partido juega con cartas marcadas en su labor de oposición, con supuesta ayuda de ciertos jueces. García-Page ha expresado su confianza en que Sánchez sea capaz de demostrar sus acusaciones, enfatizando que de lo contrario, se trataría de una mera «ceremonia» de «bulo para arriba, bulo para abajo».
Durante una entrevista en Telecinco, García-Page subrayó la gravedad de acusar a un juez de estar en connivencia con alguna de las partes, lo que, según él, supondría una acusación de prevaricación. «Cuando se plantea que un juez esté en connivencia, se le está haciendo un planteamiento de prevaricación, y es de las cosas más graves que se puede acusar a un juez», ha afirmado. García-Page también ha indicado que cualquier afirmación de este tipo debería estar respaldada por pruebas concretas.
En cuanto a la posibilidad de que haya una campaña judicial contra Pedro Sánchez relacionada con su esposa, Begoña Gómez, el presidente de Castilla-La Mancha ha expresado que no podría realizar un análisis sin contar con más información. «Me temo que nadie puede llegar a tener ese tipo de información», ha agregado, subrayando que quien dispusiera de datos concretos debería presentar una denuncia.
García-Page ha reconocido su preocupación por el ‘caso Koldo’ y ha declarado que esta inquietud debería ser compartida por todo el PSOE. «Evidentemente no estamos hablando de una actuación solo particular, sino de una actuación grupal», ha dicho, recordando que se encuentra en la fase de investigación y que los medios de comunicación sugieren que «hay materia» suficiente para que el juez continúe con su trabajo.
El presidente castellanomanchego ha destacado la rapidez con la que el PSOE pidió el acta del exministro José Luis Ábalos, lo que considera una señal clara de la gravedad de la situación, y ha indicado que si se toma la decisión de expulsar a un miembro del partido temporalmente, es porque «se intuye o se da por hecho que los indicios que existen son graves». No obstante, ha rechazado que esta situación afecte ni al presidente del Gobierno ni a otros miembros de su gabinete.