El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha hecho un llamado este viernes a las organizaciones agrarias para «cerrar filas» y unirse en la lucha contra la propuesta de etiquetado del vino que se está discutiendo en Europa. En una rueda de prensa celebrada en Ciudad Real, García-Page expresó su preocupación por lo que considera un intento que busca «complicarnos la vida» mediante la estigmatización del producto.
El mandatario regional anunció un encuentro programado para el 14 de mayo con el comisario europeo de Agricultura, Christophe Hansen, donde tiene la intención de presentar la postura de Castilla-La Mancha en contra de etiquetar el vino en función de su contenido etílico. García-Page subrayó que la manera en que se consuma el vino depende de proporciones y de la responsabilidad del consumidor, destacando que el enfoque debe centrarse en el consumo moderado y consciente.
Además, el presidente regional enfatizó las profundas implicaciones culturales que tendría la posible estigmatización del vino, un producto que tiene un peso significativo tanto en Castilla-La Mancha como en el conjunto del país. «La cultura de este país, la cultura de esta región, la cultura de esta provincia, no puede, bajo ningún concepto, diferenciarse de la cultura del vino», argumentó García-Page, insistiendo en la importancia de este producto en la identidad local.