El presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha calificado este sábado al PSOE como atravesando la «crisis más seria» en términos de corrupción en la historia reciente democrática de España. Su intervención se ha producido en el marco del Comité Federal del partido, que se celebra en la sede de Ferraz, donde ha expresado su interés por escuchar propuestas para abordar esta grave situación, subrayando que no busca «escapatorias ni vías de escape».
Al acceder al cónclave socialista, García-Page ha enfatizado la necesidad de centrarse en «lo que pase mañana» y de las soluciones políticas que puedan surgir del legado fundacional de Pablo Iglesias. Ha hecho hincapié en que es crucial que la dirección del partido ofrezca alternativas, ya que, de lo contrario, «forma parte del ruido».
El líder autonómico ha llamado a la generosidad hacia los socialistas que han liderado el partido en el pasado y hacia aquellos que lo harán en el futuro. Destacó la importancia de las siglas y la historia del partido sobre los propios dirigentes: «Este es un momento para estar a la altura de las circunstancias», enfatizó.
Aunque las decisiones que se tomen en el comité federal son de carácter interno, García-Page ha indicado que su relevancia trasciende el ámbito de la reunión, y ha manifestado su deseo de que esta situación se resuelva de manera definitiva. «Me importa sobre todo salir con la garantía, con la certeza, de que no hay más», declaró.
El presidente de la Junta también ha afirmado que, a pesar de escuchar a Pedro Sánchez durante el encuentro, el PSOE no puede «esconder la cabeza ni aplicar paños calientes» frente a la crisis.
En su intervención, García-Page ha dejado claro que la derecha no está en posición de dar lecciones sobre corrupción al PSOE, aunque ha remarcado que la corrupción no debe medirse en términos comparativos con el Partido Popular. «Es un tema mucho más serio», advirtió, destacando que la izquierda ha llevado siempre a gala una mayor intolerancia social hacia la corrupción que la derecha.
Sobre los nuevos nombramientos en la cúpula del partido, García-Page ha revelado que él se ha enterado de ellos a través de los medios de comunicación, incluyendo la reciente renuncia de Francisco Salazar a la Secretaría de Organización debido a acusaciones de comportamiento machista.
Durante su llegada a la sede del PSOE, García-Page se ha enfrentado a un ambiente tenso, con simpatizantes de Pedro Sánchez que le han gritado consignas de rechazo, incluyendo «fuera» y «sinvergüenza». A pesar de ello, fuentes cercanas a García-Page han minimizado la relevancia de los insultos, indicando que no tendrán un impacto significativo a nivel electoral.