El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha expresado su preocupación por la reciente justificación de actos extremadamente graves en el ámbito nacional. Durante su intervención en el acto de presentación de la Hoja de Ruta del Hidrógeno, celebrado en Toledo, García-Page se refirió específicamente a la presencia de Mohamed Houli Chemlal en el Congreso, un individuo condenado por su participación en los ataques terroristas que tuvieron lugar en Barcelona y Cambrils en agosto de 2017.
García-Page subrayó con indignación que se ha llegado a un punto en el que se «santifica el lema de hacer de la necesidad virtud» para justificar acciones inaceptables. Hizo énfasis en cómo la participación de Chemlal en el Congreso representó una humillación a la sede de la soberanía nacional, recordando que durante su intervención el terrorista acusó al Centro Nacional de Inteligencia (CNI) de permitir que el imán de Ripoll, Abdelbaki Es Satty, construyera la célula responsable de los ataques.
El presidente regional mostró su rechazo ante lo que considera una falta de respeto hacia las instituciones y la memoria de las víctimas del terrorismo, apuntando a la necesidad de una reflexión seria sobre la normalización de discursos que trivializan la violencia y su impacto en la sociedad. García-Page enfatizó la importancia de no permitir que se justifiquen actos que atentan contra la convivencia y la paz en el país.