El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha manifestado su preocupación ante el desarrollo futuro del ‘caso Koldo’, sugiriendo que este asunto podría profundizarse con más revelaciones. En una intervención ante los medios en Toledo, ha instado a una resolución rápida y decidida del caso, argumentando la necesidad de «cortar por lo sano cuanto antes».
García-Page ha aclarado su visión sobre el posible involucramiento de figuras políticas, negando que haya indicaciones de participación directa de cargos políticos en el escándalo. Sin embargo, ha señalado que «otra cosa es el entorno de los políticos», dejando entrever la posibilidad de que individuos vinculados a los políticos puedan estar envueltos.
El líder manchego ha admitido la inexistencia de «protocolos para gestionar un caso como éste», resaltando la falta de precedentes o guías establecidas. Pese a ello, ha expresado su confianza en que ni el presidente del Gobierno ni los políticos que conoce buscan el enriquecimiento a través de la política.
No obstante, García-Page ha declarado que «hoy por hoy todavía no se sabe exactamente dónde acaba el hilo de esta madeja», reconociendo que las ramificaciones del caso podrían ser extensas y aún desconocidas. Ha concluido sus declaraciones expresando el temor de que este caso continúe dominando el panorama político de España durante un tiempo considerable.
