El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, reafirmó este miércoles que su gobierno no cambiará su enfoque a pesar de los resultados en las elecciones regionales y municipales, así como en las próximas elecciones generales. García-Page advirtió contra las especulaciones y aseguró que no hará oposición a nadie en España ni en la región.
Durante el acto de toma de posesión del nuevo delegado de la Junta de Castilla-La Mancha en Toledo, Álvaro Gutiérrez, García-Page señaló que su gobierno seguirá siendo coherente y cumplirá con sus compromisos. Reconoció que los resultados de las próximas elecciones pueden afectar a la región, pero destacó que esto no cambiará el rumbo de la autonomía.
El presidente autonómico afirmó que se está viviendo un momento «complejo» en el que muchas administraciones están «mudando de piel». Destacó que marcará un mapa diferente para la próxima legislatura y que los resultados de las elecciones anteriores se han debido más a factores nacionales que locales, lo que no disminuye su legitimidad.
García-Page subrayó que las relaciones institucionales en Castilla-La Mancha no se verán afectadas y que buscará llegar a acuerdos con todos aquellos que estén dispuestos. Sin embargo, también advirtió que no permitirá el sectarismo y criticó a aquellos políticos que lanzaron mensajes extraños durante la campaña electoral.
El presidente lamentó que algunos responsables públicos no hayan hablado del Tajo durante la campaña electoral y afirmó que para la política hidráulica pueden haber problemas. Pidió una mirada más peninsular en España, no solo mediterránea, y mencionó los «motores» de la región, como La Mancha, el Corredor del Henares y la periferia de Madrid.
García-Page aseguró que nadie debería estar asustado por la acción de su gobierno y que solo le importa que la gente viva con normalidad. Por último, felicitó a Gutiérrez y expresó su deseo de que los delegados de la Junta sean interlocutores y referentes para los alcaldes de sus provincias, trabajando para solucionar los problemas de las personas. Concluyó diciendo que los objetivos marcados son demasiado importantes como para distraerse.