En una reciente entrevista en Onda Cero, recogida por Europa Press, Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha, ha expresado su inquietud sobre la situación política actual del PSOE, que según sus palabras, parece encontrarse en un «laberinto» del cual no ve una salida clara. García-Page ha atribuido esta complicación a los pactos del partido con formaciones independentistas, mencionando que los «pequeños partidos mandan demasiado», una circunstancia que está llevando al PSOE por un camino que puede resultar en que la sociedad no lo reconozca como el baluarte del constitucionalismo que tradicionalmente ha sido.
El político manchego sostiene que, aunque es natural que los partidos busquen lo mejor para sí mismos, los compromisos adquiridos han forzado cesiones que están alejando al PSOE de sus límites y proporciones aceptables. Esta dinámica ha acarreado una «situación laberíntica» que al parecer, está dificultando que el partido mantenga su identidad y cohesión.
Cuando se le cuestionó sobre la posibilidad de que el PSOE encuentre una salida a este laberinto, García-Page manifestó tener dudas, señalando que la solución podría provenir de la sociedad española, la cual, a su juicio, tiene más perspectiva que la clase política en su conjunto. Sugiere que existe el riesgo de que se genere una desafección hacia el partido, que puede ser gradual o súbita, sobre todo en aquellos que lo han visto como un referente constitucional y de amplias mayorías.
García-Page se refirió a los cambios en el espectro político del PSOE como una «etapa» de su evolución, recordando que la historia del partido tiene más de 140 años y que este período no será más que un capítulo en esa larga trayectoria. Sin embargo, no dejó de mencionar que los resultados electorales desde el año 2020, momento en que se establecieron pactos con Podemos y con partidos independentistas, han sido en su mayoría «muy negativos» para el PSOE.
En su análisis también tocó el tema del exministro de Transportes José Luis Ábalos y del escándalo que involucra a su antiguo asesor Koldo García en un caso de presuntas irregularidades en contratos de mascarillas durante la pandemia. García-Page cree que la responsabilidad política de Ábalos es evidente y que este, finalmente, cederá su acta de diputado y dimitirá.
Finalmente, el presidente de Castilla-La Mancha remarca que su punto de vista no es el predominante en el partido, reconociendo la amplia autoridad y respaldo que el secretario general, Pedro Sánchez, tiene dentro del PSOE. García-Page, en un compromiso personal con sus principios, ha declarado que abandonará su militancia en el partido en caso de que las decisiones internas resulten totalmente incompatibles con sus valores.
