El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha expresado su férrea oposición al trazado del AVE a Extremadura que se está planificando en Toledo. Durante su intervención en el acto de clausura de ‘Castilla-La Mancha, Región Europea del Deporte 2024’, García-Page criticó a «algunos ingenieros» que, según él, están optando por un diseño que parece más un ‘scalextric’ que un proyecto ferroviario serio.
El presidente aseguró que este enfoque no solo complicaría el acceso a los hogares de «cientos y cientos» de ciudadanos, sino que también podría tener repercusiones negativas en el patrimonio histórico, la arqueología y el impacto visual en una ciudad que cuenta con un estatus de protección special. García-Page subrayó la importancia de que el AVE llegue a la región, pero enfatizó que debe hacerse con un diseño que respete el entorno y el bienestar de los habitantes.
«Hay ingenieros que se dedican a hacer muy difícil lo fácil», argumentó el presidente, instando a que la llegada del AVE se realice con el mejor proyecto posible que tome en cuenta las particularidades de Toledo y sus habitantes.