Este miércoles, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha abordado la posibilidad de un adelanto electoral a nivel nacional, ubicando su clave en el desarrollo de la situación judicial que se está viviendo en el país. En un desayuno informativo organizado por La Razón, García-Page expresó que “hay mucha presión ambiental y muchos asteroides en movimiento”, refiriéndose a la inestabilidad política.
El presidente regional se mostró cauteloso al comentar que la clave radica en determinar si los acontecimientos judiciales actuales son una tormenta que precederá a la calma o si, por el contrario, representan un fuerte viento que anticipa una gran tormenta, lo cual podría ser grave. A pesar de ello, aseguró no saber lo que ocurrirá en el futuro y destacó que, tradicionalmente, los adelantos electorales ocurren cuando el partido en el gobierno considera que es el momento adecuado para mejorar sus resultados. En su opinión, esta lógica sugiere que un adelanto electoral no es inminente.
García-Page también manifestó su deseo de que el PSOE pueda salir indemne de la actual situación de riesgo, describiendo el panorama político como un «precipicio peligroso» y calificando de «incomprensible» lo que está sucediendo en cuanto a la corrupción. Lamentó la tendencia hacia un análisis frentista en la política actual, donde la culpa de los fracasos se imputa al adversario.
En relación al ‘caso Koldo’, el presidente se refirió a Víctor de Aldama, presunto conseguidor del caso, señalando que no ha tenido contacto con él y sugiriendo que podría ser “una bomba de racimo” dado su vínculo con diversos sumarios. García-Page advirtió sobre la posible conexión entre dirigentes del PSOE y del Gobierno y expresó su preocupación por la estrategia defensiva del implicado, que podría hacer la causa inviable a largo plazo.
Por otro lado, aclaró que no se encuentra involucrado en ninguna conspiración política y que expresa sus opiniones con libertad, sin aspiraciones personales. También descartó que le tenga miedo a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ni a otros opositores políticos, afirmando que su temor se centra en que la sociedad española asista pasivamente al espectáculo político.
García-Page opinó que existe un interés por relanzar la figura de Ayuso, sugiriendo que esto podría ser una estrategia para perjudicar a Alberto Núñez Feijóo. En su intervención, también reflexionó sobre la política internacional, señalando que Estados Unidos ha perdido su papel como líder moral en el planeta, lo cual considera preocupante.
Finalmente, el presidente resaltó la importancia de mantener la autoestima como europeos, argumentando que la unidad es esencial para que Europa y España sean fuertes frente a otros bloques mundiales, como el chino y el americano. Concluyó que, sin unidad, la situación será precariedad absoluta.
