El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, expresó este jueves su desacuerdo con las declaraciones realizadas por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, sobre la corrupción en los gobiernos de Felipe González. García-Page consideró que las alusiones hechas por Sánchez durante el pleno monográfico sobre corrupción en el Congreso de los Diputados eran «francamente mal» e «innecesarias».
Durante el pleno, Pedro Sánchez reconoció la gestión de González, destacando que «hizo grandes cosas», pero a la vez lamentó que «su gestión también sufrió el zarpazo de la corrupción». Estas palabras han generado reacciones en diferentes sectores políticos, y García-Page no ha dudado en manifestar su postura tras firmar, en la sede del Gobierno regional, los estatutos de la Interprofesional de la Denominación de Origen Valdepeñas.
El presidente regional señaló que «ningún Gobierno es infalible contra la corrupción», subrayando la complejidad de la lucha contra este fenómeno en la política. Su intervención pone de relieve las tensiones entre diferentes líderes políticos y la necesidad de abordar la corrupción de manera constructiva.