El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha expresado su entusiasmo este viernes sobre la reciente elección del Papa León XIV, resaltando su potencial para ser un «contrapunto estadounidense» capaz de abordar las grandes contradicciones actuales. Este comentario se produjo en Tokio, Japón, donde García-Page lidera una delegación de la comunidad autónoma dedicada a la promoción de Castilla-La Mancha en el mercado asiático.
Durante una reunión de trabajo en la capital japonesa, el presidente regional valoró la elección del nuevo Papa, afirmando que «la Iglesia termina teniendo una multi sensibilidad mundial» y que es capaz de «detectar muy bien los momentos históricos». Además, García-Page extendió al nuevo sucesor de San Pedro sus «enhorabuenas, sinceras e ilusionadas» tras el notable pontificado de Francisco, subrayando el «alma social» de León XIV, quien es visto como un portavoz de la experiencia social de la Iglesia y su misión con los más desfavorecidos.
Asimismo, Emiliano García-Page recordó la visita del actual Papa a Oropesa, Toledo, en 2002, expresando su convencimiento de que el Pontífice conserva buenos recuerdos de su paso por la región, lo que considera un aspecto positivo para España y los católicos del país. García-Page manifestó su esperanza de poder saludar al Papa en persona en el futuro.
Unas horas antes, el presidente había felicitado al nuevo Papa a través de sus redes sociales, deseándole lo mejor y reconociendo que su nombramiento marca el inicio de «una nueva etapa de desafíos y oportunidades para reforzar los valores de paz, justicia social y tolerancia».