El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha dado la bienvenida a cuatro niños procedentes de la Franja de Gaza que han llegado este jueves a la comunidad autónoma para recibir tratamiento médico en centros hospitalarios locales. Durante sus declaraciones, García-Page ha descrito la situación en Gaza como “un infierno terrible” y ha expresado su consternación al afirmar que «nos pone todos los días al límite en nuestra vida».
García-Page ha puesto de manifiesto la condición de tres de los niños que requieren atención sanitaria inmediata y ha enfatizado el carácter compasivo de la sociedad de Castilla-La Mancha, a la que ha calificado de “sociedad hospitalaria y humanitaria”. Estas acciones reflejan el compromiso de la comunidad autónoma con la atención humanitaria.
En relación con la política y el tratamiento mediático de estos temas, el presidente autonómico ha sido muy claro en su rechazo a convertir la inmigración, y en especial la situación de los niños en un espectáculo político. García-Page ha expresado que “esto tendría que estar fuera del merchandising político y del abuso, sobre todo porque hablamos de niños”.
A su vez, ha enfatizado la necesidad de manejar la llegada y integración de dichos niños con la transparencia y el respeto adecuados, acordes con la dignidad humana que merece cada individuo.
García-Page también ha querido llamar la atención acerca de la persistencia de conflictos en todo el mundo, señalando que existen «55 conflictos bélicos abiertos». Según sus palabras, aunque algunos de estos conflictos no son ampliamente conocidos, la magnitud de la tragedia es idéntica. El presidente autonómico ha concluido expresando su deseo de que estos conflictos cesen, remarcando así su posición y la de Castilla-La Mancha frente a las tensiones bélicas y las consecuencias que de ellas se derivan.
