El presidente electo de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha presentado su programa electoral en materia política para los próximos cuatro años en el parlamento. Uno de los principales objetivos de García-Page es establecer una ley de incompatibilidad política ambiciosa, que regule de manera detallada el régimen de incompatibilidades y puertas giratorias, así como todas las cuestiones relacionadas con la transparencia y la honestidad en el acceso a cargos públicos.
Según García-Page, Castilla-La Mancha ya ha demostrado su compromiso con la honestidad, pero aún es posible dar un paso más allá. Por eso, propone también otra ley para agilizar los trámites burocráticos, de manera que se priorice el silencio negativo en los procedimientos administrativos y se promueva la digitalización como herramienta para agilizar los procesos democráticos.
El nuevo presidente regional entiende que Castilla-La Mancha está siendo observada con atención y por eso apuesta por seguir avanzando. Su primera reunión como presidente será, una vez más, con los agentes sociales, con el fin de retomar desde el primer día políticas sociales a un nivel elevado, actualizando los pactos existentes y trabajando conjuntamente para lograr objetivos comunes.
De esta manera, García-Page pretende iniciar una nueva senda de consenso social que abarque diversos ámbitos sectoriales, con el objetivo de crear, tal como prometió en campaña, 100.000 nuevos empleos. Además, se mantendrá la dinámica de los planes de empleo, convocando una nueva edición en octubre con casi 9.000 puestos de trabajo en el sector público, en la cual se espera la participación de ayuntamientos y diputaciones.
En este sentido, García-Page también ha anunciado la renovación de un programa que creará un centenar de empleos cualificados en colaboración con la Universidad de Castilla-La Mancha, a través del Plan Investigo. Esta iniciativa, que contará con mil millones de euros durante la legislatura, unirá a las empresas y a las dos universidades de la región, UCLM y UAH.
Otra de las leyes que se propone es la eliminación de la brecha salarial entre hombres y mujeres, una medida que García-Page considera necesaria y más sencilla de lo que podría parecer. En cuanto a la industria, se espera una nueva regulación que vaya más allá de lo establecido en otras regiones y en las ayudas estatales para los autónomos.
Para ello, García-Page propone la creación de la «Tarifa Plana Plus», una medida que busca mejorar las numerosas ayudas ofrecidas por la administración, superando los simples anuncios y discursos.
En cuanto a otras medidas económicas, se destinarán 9 millones de euros para el crecimiento de las pequeñas y medianas empresas, además de la puesta en marcha de oficinas provinciales de asesoramiento y un centro de emprendimiento en Toledo con una inversión de dos millones de euros.
En la provincia de Guadalajara, García-Page propone destinar 8 millones de euros para crear una «gran ciudad del cine» en la capital, proyecto que ya ha recibido la aprobación del Consejo de Ministros y que ahora espera avanzar. Sin embargo, se espera la colaboración del Ayuntamiento de Guadalajara, que ha cambiado de manos tras las últimas elecciones y ahora está en manos del Partido Popular.
En el ámbito turístico, García-Page tiene la intención de impulsar los parques arqueológicos en las cinco provincias de Castilla-La Mancha.
En resumen, el programa político de Emiliano García-Page para los próximos cuatro años en Castilla-La Mancha se centra en la introducción de leyes para regular la incompatibilidad política y las puertas giratorias, agilizar los trámites burocráticos, lograr el consenso social en diversos sectores, crear empleo, eliminar la brecha salarial, apoyar a los autónomos y promover el crecimiento económico. También se plantea la creación de una ciudad del cine en Guadalajara y la promoción de los parques arqueológicos en toda la región.
