El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha expresado su satisfacción tras la reciente aprobación del nuevo Estatuto de Autonomía en el Parlamento autonómico, un paso que considera no generará conflictos en el Congreso de los Diputados, gracias a su alineación con el sistema constitucional. Durante su intervención en el acto institucional celebrado este sábado en Albacete con motivo del Día de la Región, García-Page lanzó una ironía al afirmar que con el nuevo Estatuto podría lograrse que el PSOE y el PP voten de forma unida en el Parlamento.
García-Page recordó su compromiso de desarrollar un nuevo Estatuto, resaltando que este solo se llevaría a cabo si existía un acuerdo amplio. «Podíamos haberlo sacado con la mayoría del Gobierno, pero es un problema de actitud. Merece la pena que las cosas que se hacen con vocación de durar se hagan con el mayor acuerdo posible», subrayó el presidente autonómico.
El mandatario también reivindicó que el nuevo texto es «fiel al espíritu de la Constitución, que no creó autonomías para que estemos dividiendo el país». En este sentido, García-Page destacó que el Estatuto es «leal con esta tierra» y aseguró que no busca divisiones ni conflictos, pero que tampoco rehuye enfrentarlos si es necesario, reafirmando su compromiso con el sistema constitucional vigente.