Puertollano, en la provincia de Ciudad Real, se convertirá en la sede de una nueva oficina de asesoramiento dedicada al desarrollo del hidrógeno renovable. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, realizó este anuncio durante la inauguración del evento ‘Accelera by Cummins’, que tuvo lugar en la sede de la compañía en Guadalajara.
García-Page destacó la importancia del hidrógeno como parte del proceso de electrificación que está viviendo el país, subrayando que es «una garantía» debido a su capacidad para transportar energía de manera eficiente. Sin embargo, también enfatizó que la producción de hidrógeno requiere una gran cantidad de energía, y para que este sea considerado verde, la energía utilizada en su producción también debe ser de origen renovable.
El Centro Nacional del Hidrógeno, situado en Puertollano, será el lugar donde se instalará esta oficina de asesoramiento, específicamente en el Instituto de Sistemas Fotovoltaicos de Concentración (Isfoc), bajo la dependencia de la Consejería de Desarrollo Sostenible. García-Page subrayó su deseo de que la producción de hidrógeno y la industria asociada se establezcan en la región en lugar de buscarse en otros lugares.
Históricamente, Castilla-La Mancha ha sido pionera en el desarrollo de energías renovables, siendo una de las primeras regiones en adoptar la instalación de molinos eólicos antes de que existieran regulaciones al respecto. «Queremos que aquí se residencie también la producción de hidrógeno», enfatizó el presidente.
La región cuenta con amplios espacios disponibles para el desarrollo de energía renovable, lo que García-Page describió como una «enorme despensa energética». Reiteró que, aunque se considera sustituir algunas áreas de cultivo, como olivos y viñedos, el potencial para la instalación de paneles fotovoltaicos es considerable.
Asimismo, el presidente autonómico subrayó que la transición de los combustibles fósiles a las energías renovables es un cambio inevitable y que España tiene ante sí la oportunidad de convertirse en un líder en este sector, lo que podría traducirse en un aumento del 20 por ciento en competitividad, gracias a la posibilidad de generar su propia energía.
García-Page también abordó la necesidad de que el país haga avanzar su infraestructura eléctrica. Hizo hincapié en que no puede haber una producción de energía renovable superior a la que puede ser gestionada por la red y que es fundamental eliminar los obstáculos que dificultan la instalación de empresas que requieren un suministro de energía fiable.
Finalmente, el presidente planea plantear estos temas, incluidas posibles reformas legislativas, al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en su próxima reunión. La visión de García-Page apunta a una mayor inversión y desarrollo en el sector eléctrico para aprovechar el potencial renovable de la región.