El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha enfatizado que la riqueza de cualquier región de España «es nacional» y no exclusiva de las comunidades autónomas. Durante la entrega de los Premios de Turismo & Raíz Culinaria Castilla-La Mancha 2024, el presidente argumentó que «la riqueza es un recipiente líquido que se comparte y que interactúa permanentemente».
García-Page hizo estas declaraciones tras la reciente aclaración de la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, sobre el acuerdo alcanzado entre el PSC y ERC en relación a una «financiación singular» para Cataluña. Este acuerdo incluye la cesión de la recaudación del IRPF a la administración catalana y la intención de expandir esta medida a otros impuestos.
El presidente de Castilla-La Mancha expresó su sorpresa ante la noción de que la riqueza debe ser distribuida de manera aislada, sugiriendo que la riqueza generada en Cataluña también pertenece al resto del país. «Me hace mucha gracia cuando alguien habla de solidaridad, cupo solidario hablan en algunas zonas», destacó.
Continuando con su reflexión, García-Page sostuvo que «la soberanía nacional reside básicamente en el hecho de redistribuir, en compartir la riqueza que es de todos». Cuestionó la lógica detrás de segmentar la riqueza y argumentó que este concepto no encaja en los principios de la Constitución.
El presidente también comparó la situación con el contexto europeo, donde según él, se avanza hacia una mayor convergencia y cooperación, jugando con la idea de que incluso en términos de defensa, «compartimos casi las fuerzas armadas con la OTAN y hemos abierto fronteras». En su conclusión, García-Page remarcó que la solidaridad como concepto no se aplica en este contexto, ya que se debe hablar de redistribución equitativa, sugiriendo que «pague más el que más tiene y menos el que menos».
