La portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Esther Padilla, ha expresado su preocupación por el estado actual del liderazgo de Paco Núñez en el Partido Popular (PP) castellanomanchego y la creciente influencia de Vox en la política regional. En una entrevista concedida a Europa Press, Padilla ha comentado que el liderazgo de Núñez está «cuestionado» y a la baja, una percepción compartida por el mismo Núñez y su círculo cercano, sin embargo, oficialmente se niega tal situación. Padilla reveló que esta circunstancia es «un secreto a voces».
La portavoz se refirió a las recientes declaraciones de Carmen Fúnez, quien públicamente apoyó a Núñez, lo que Padilla describió como el «abrazo del oso», indicio de una posible falta de confianza en el liderazgo de Núñez dentro del partido. No obstante, Padilla no considera a Fúnez como la sustituta ideal de Núñez, ya que ella debería actualizarse más sobre los asuntos de la región.
Además, Padilla manifestó su inquietud por lo que califica como el discurso «muy radical» de Vox, que ha ganado representación en el ámbito municipal y en el Parlamento de Castilla-La Mancha. Según la portavoz, Vox actúa como una «muleta» para el PP y lo empuja hacia «políticas de extremos» que son incongruentes con las políticas del Gobierno regional.
Particularmente, Padilla critica la estrategia de Vox de generar odio, atacar y desprestigiar tanto políticamente como personalmente al adversario, lo que califica de peligroso para la convivencia democrática. A su juicio, la gravedad de la situación no radica en que los miembros de Vox no estén trabajando efectivamente y sí estén cobrando en el parlamento regional, sino en «el odio que inoculan» como método para alcanzar el poder político.
Las declaraciones de Esther Padilla ponen de relieve la preocupación del Gobierno de Castilla-La Mancha ante los cambios y desafíos en el panorama político regional, enfatizando la necesidad de hacer frente a las actitudes y discursos que puedan desestabilizar el entorno político y social de la comunidad.
