La ciudad de Ciudad Real se encuentra en un proceso de transformación y promoción de sus festividades más emblemáticas. El alcalde Paco Cañizares, en una estrategia de envergadura, ha expresado su determinación para que la fiesta de La Pandorga obtenga la declaración de Interés Turístico Internacional durante su mandato, buscando equipararse con la notoriedad ya obtenida por la Semana Santa de la localidad.
En un diálogo con Europa Press, Cañizares ha destacado su objetivo de ejecutar un “planteamiento de mayor ambición” para realzar el perfil turístico de La Pandorga. Esta visión se reflejará en los próximos presupuestos municipales, donde se reservarán partidas específicas destinadas al fomento de esta festividad tradicional.
Para lograr este propósito, el alcalde ha hecho un llamado a la colaboración de numerosos colectivos sociales de la ciudad. Acentuando la importancia del entusiasmo comunitario, Cañizares ha señalado que la verdadera esencia de las fiestas resulta de la participación ciudadana, más allá de la programación que pueda establecer el ayuntamiento. El respaldo de «todos los pandorgos y todas las dulcineas» y el papel crucial de la Hermandad de la Virgen del Prado son elementos clave que el alcalde espera movilizar para darle a La Pandorga la magnitud que merece.
Asimismo, descarta la posibilidad de alterar las fechas de celebración de La Pandorga debido a la “intensidad” única que esta posee y resalta la necesidad de proyectar la fiesta a nivel nacional, siempre enraizada en la tradición y en la veneración a la Virgen del Prado, emblema de los agricultores de la zona. El alcalde promete una mejora en la programación y proporcionar más herramientas para su difusión a nivel internacional.
En paralelo, el alcalde planea realzar la Semana Santa, una festividad ya distinguida, y ha comunicado a la Asociación de Cofradías que dispondrán de un mayor presupuesto, con un incremento del 25% en su asignación. Este aumento busca perfeccionar los recorridos, las ubicaciones y engrandecer aún más la festividad. Cañizares enfatiza que, aunque la Semana Santa es organizada por la Iglesia y las hermandades religiosas, el papel del Ayuntamiento es esencial para su embellecimiento y mejora continua.
Este esfuerzo conjunto entre el gobierno municipal y los colectivos ciudadanos refleja una apuesta clara por el patrimonio cultural y la identidad local, al mismo tiempo que pretende situar a Ciudad Real en el panorama turístico global.
