En una exitosa intervención de las fuerzas de seguridad españolas, la Guardia Civil y la Policía Nacional han llevado a cabo una operación conjunta que ha culminado con la detención de 33 personas de diversas nacionalidades y un amplio rango de edades implicadas en una red de narcotráfico con base en la provincia de Albacete. La operación, denominada ‘Golden-Navaja’, ha conseguido asestar un golpe significativo al tráfico de drogas a nivel tanto nacional como internacional, extendiéndose a otras provincias y países europeos.
La investigación, que se inició a principios de 2023, tomó forma al recabar datos sobre individuos sospechosos de formar parte de esta red criminal. La colaboración de los dos cuerpos del orden público fue esencial dado que compartían objetivos similares, lo que los llevó a realizar un esfuerzo conjunto para identificar a los miembros y desmantelar la organización.
El liderazgo de la operación criminal recaía en dos individuos establecidos en Casas Ibáñez, quienes se encargaban de la coordinación y ejecución de las operaciones de transporte de sustancias como hachís hacia destinos europeos como Francia e Italia. Además, el grupo se ocupaba de distribuir otras drogas, incluyendo la cocaína, la heroína y la marihuana.
Para mover la droga, la organización utilizaba vehículos y camiones de gran tonelaje con dobles fondos artesanales para ocultar las sustancias, partiendo desde Casas Ibáñez y Requena. En Requena, además, disponían de una nave industrial para almacenar y preparar la droga.
Las diligencias policiales no se circunscriben solo a España, sino que también han resultado en importantes aprehensiones en Francia, país donde se ha colaborado estrechamente con Europol para coordinar las operaciones.
La organización criminal operaba en tres niveles jerárquicos, con una estructura piramidal que incluía líderes, colaboradores de confianza y transportistas. Estos últimos se encargaban de preparar los vehículos para el transporte y colocar dispositivos GPS para seguimientos. También se ha conocido que la organización estaba armada para defenderse de otras bandas criminales.
Además, se han detenido emisarios de otras organizaciones delictivas en Requena, al fiscalizar la carga y la logística del tráfico de drogas. Las actividades ilícitas de la banda no se limitaban al transporte, sino que también se dedicaban a la distribución local en distintas localidades de Albacete.
En los 20 registros realizados, se han incautado más de cuatro toneladas de hachís, una tonelada de heroína y cocaína, miles de pastillas de MDMA, marihuana, dinero en efectivo, vehículos de alta gama, armas de fuego y otros efectos relacionados con la actividad delictiva.
Las autoridades han movilizado a un gran número de agentes de diversos departamentos y unidades de la Policía Nacional y de la Guardia Civil para llevar a cabo esta operación.
Bajo la coordinación del Juzgado de Instrucción de Casas Ibáñez, 17 de los 33 detenidos han sido puestos en prisión provisional, marcando otro éxito en la lucha contra el tráfico y distribución de estupefacientes en España y el entorno europeo.