La Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC) de Toledo ha emitido una advertencia a los vecinos de la ciudad sobre prácticas fraudulentas llevadas a cabo por una supuesta empresa de reparación de electrodomésticos. Según informa la OMIC, esta empresa se anuncia en Internet como servicio técnico de reparación, pero en realidad realiza prácticas fraudulentas que han afectado a varios residentes de la capital regional.
Ana Isabel de la Fuente, técnico de la OMIC, ha explicado que los estafadores utilizan un ‘modus operandi’ que ya había sido utilizado en el pasado, pero que ahora ha vuelto a surgir. El proceso comienza cuando los vecinos, al tener una avería en uno de sus electrodomésticos, contactan con esta supuesta empresa de reparación a través de un número de teléfono móvil proporcionado por ellos.
Una vez en el lugar, el falso técnico realiza un simulacro de reparación, incluso llegando a hacer varias visitas para dar credibilidad a sus servicios. Sin embargo, en realidad no realiza ninguna reparación, no cambia ninguna pieza o, en el peor de los casos, sustituye piezas por otras usadas, cobrándolas como nuevas. Al finalizar la visita, el estafador cobra en efectivo una cantidad aproximada de 300 euros, argumentando que debe regresar en otra ocasión para finalizar la reparación.
La OMIC ha informado a la Policía Nacional sobre estas prácticas fraudulentas y ha colaborado con los agentes para intentar frenar la actuación de estos estafadores. Desde el servicio municipal de consumo del Ayuntamiento de Toledo se recomienda a los vecinos que exijan al supuesto técnico que se identifique y que no firmen nada ni realicen ningún pago en efectivo en el momento de la visita. Además, se aconseja no proporcionar información bancaria y, en caso de dudas, acudir lo antes posible a la OMIC para recibir asesoramiento, y si se confirma que se trata de una estafa, presentar una denuncia en la Policía.
En otro orden de noticias, la OMIC ha dado a conocer el balance del primer semestre del año, en el que ha atendido a un total de 2.381 consumidores y ha logrado recuperar al menos 100.141 euros para los vecinos. Este servicio gratuito y cada vez más demandado resuelve eficazmente conflictos entre consumidores y empresas.
Un caso ejemplar resuelto por la OMIC es el de un consumidor que reclamó a su aseguradora el pago de los daños ocasionados en el suelo de su vivienda por la rotura de un radiador. La aseguradora le ofreció una compensación de 450 euros, mientras que el coste de la reparación ascendía a unos 1.600 euros. El consumidor recurrió a la OMIC y presentó pruebas documentales de los daños, incluyendo una factura de reparación. Tras tramitar la reclamación, la aseguradora accedió a pagar la totalidad de la reparación.
La OMIC destaca la importancia de acudir a este servicio cuando se presenten problemas con empresas y proveedores de bienes y servicios, ya que su intervención puede ayudar a los consumidores a obtener soluciones adecuadas y justas.
