La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha anunciado un importante avance legal para el personal residente en formación especializada al conseguir la primera sentencia que reconoce el derecho al pago completo de la paga extra con efectos retroactivos desde 2022. Este fallo, que no admite recurso, podría facilitar la resolución favorable de otras reclamaciones aún en trámite judicial.
La paga extraordinaria se compone de la cantidad correspondiente a un mes de paga ordinaria y del complemento de grado de formación. Según CSIF, el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) no había estado realizando estos pagos de forma integra, lo que llevó a una situación de agravio respecto a otros servicios de salud.
En 2022, la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha (TSJCM) ya había dictado una condena al Sescam, estableciendo la obligación de abonar la totalidad de las pagas extras en el marco de un conflicto colectivo. Este fallo reveló las deficiencias en las condiciones laborales y salariales que enfrentan los profesionales del Sescam. A pesar de que el Sescam intentó apelar la decisión ante el Tribunal Supremo mediante dos recursos de casación, estos fueron desestimados, obligando al Sescam a cumplir con el pago desde 2022.
Recientemente, el Juzgado de lo Social nº 1 de Albacete emitió una sentencia el 14 de marzo que reconoce el derecho de los residentes a recibir pagos retroactivos a partir de la decisión del TSJCM. En concreto, se ordena el abono de 918,56 euros por las pagas extraordinarias de 2020 que no fueron pagadas, además de un interés de mora del 10% anual sobre dicha cantidad.
Ana Isabel Fernández, responsable de CSIF Sanidad Castilla-La Mancha, ha destacado que esta situación pone de manifiesto las desigualdades salariales que sufrenden los trabajadores del Sescam en comparación con otros sectores. Fernández agregó que, a pesar de este progreso, la carrera profesional de toda la plantilla sigue paralizada y el Sescam persistía en intentar pagar solo una parte de la remuneración, en lugar del total debido.
El sindicato considera que este fallo judicial es un reconocimiento de la valía del personal en formación especializada, quien no solo percibe salarios bajos, sino que además se ve afectado por intentos de reducir aún más su remuneración.