En una reciente comparecencia tras el Consejo de Política Fiscal y Financiera, Paco Núñez, presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, ha manifestado su inquietud por la situación financiera de la comunidad autónoma. Núñez ha señalado que la región ha sufrido una significativa pérdida de financiación que asciende a 1.000 millones de euros.
La nota de prensa emitida por el Partido Popular detalla que Núñez ha acusado al presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, de desviar este presupuesto a Cataluña. La acusación apunta a una presunta «traición» de García-Page tanto a los intereses de Castilla-La Mancha como a sus compromisos políticos previos.
En palabras de Núñez, esta pérdida de financiación se atribuye a los acuerdos políticos alcanzados por el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, particularmente en lo referente a Cataluña. Sugiere que el dinero que debería beneficiar a Castilla-La Mancha se está utilizando para «pagar» dichos compromisos.
Además, el líder del PP castellanomanchego ha exigido a García-Page que impida la tramitación de la Ley de Amnistía. La postura que Núñez insta que adopte el PSOE de Castilla-La Mancha es la de rechazar el proyecto de ley a través del voto de los 8 diputados del PSOE de la región en el Congreso de los Diputados.
Paco Núñez considera que si el PSOE castellanomanchego no toma cartas en el asunto, estaría favoreciendo un «ataque sin precedentes a la Democracia, al estado de derecho y a la igualdad de los españoles». Declara que todavía hay tiempo para corregir esta «situación esperpéntica» y mantiene firme su posición exigiendo un cambio en el curso de las decisiones políticas que afectan a Castilla-La Mancha.
