En una coyuntura política crucial tras la investidura de Pedro Sánchez, Paco Núñez, líder del Partido Popular (PP) en Castilla-La Mancha, ha censurado la actuación del presidente de la comunidad, Emiliano García-Page, acusándolo de carecer de rédito político y de ser un «sanchista» más. Núñez ha rechazado vehementemente las acusaciones del PSOE que apuntan a un fomento del transfuguismo por parte de su partido.
Según Núñez, esperaba que García-Page influyera en los diputados de su partido en el Congreso para oponerse a los acuerdos que posibilitaron la elección de Sánchez, acusándolo de una traición a España por no hacer efectiva su palabra. A su vez, enfatizó que desde el PP se realizaron intentos de colaboración con Page, ofreciéndole estabilidad en su gobierno regional en caso de que deseara oponerse a iniciativas específicas del gobierno central.
El dirigente del PP condenó la conducta de García-Page durante la votación de la investidura, manifestando que los votos de los socialistas castellanomanchegos han contribuido a una fractura en el ordenamiento del país. Núñez sostiene que es totalmente falso que su partido haya promovido el transfuguismo, subrayando que solamente buscaban apelar a la conciencia de socialistas en la región.
Núñez también advirtió sobre las consecuencias que traerán los acuerdos establecidos por el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), como la distribución presupuestaria hacia Cataluña, responsabilizando a los diputados de Castilla-La Mancha vinculados a Page de ser cómplices de estos problemas.
Para finalizar, el político ha confirmado su asistencia a la manifestación en la Plaza de Cibeles en Madrid este próximo sábado, en oposición a la amnistía y otros temas de profundo impacto nacional. Núñez liderará la representación del PP de Castilla-La Mancha en esta concentración, dejando claro que su partido seguirá enfatizando el papel de los diputados socialistas de la región en decisiones nacionales cruciales.
