El presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha desvelado una propuesta compuesta por seis ejes dirigidos al presidente regional Emiliano García-Page, con el fin de instaurar políticas de consenso en línea con el reciente acuerdo para reformar el Estatuto de Autonomía. Esta proposición, que será materializada a través de la vía parlamentaria en septiembre, pretende traducir en normativas concretas los postulados del Estatuto, garantizando así sus beneficios para la ciudadanía independientemente del partido en el poder.
Núñez, en una entrevista con Diario CLM, ha destacado el esfuerzo bipartidista con el PSOE que ha permitido adaptar las «reglas del juego» a las circunstancias actuales de la Comunidad Autónoma, incluyendo aspectos relativos a sostenibilidad, igualdad y la posición de Castilla-La Mancha frente a otras autonomías.
Los pactos propuestos abarcan distintas áreas y contemplan una perspectiva inclusiva mediante la participación de la sociedad civil y la consulta a los sectores afectados. Núñez enfatiza la importancia de establecer un marco normativo estable y duradero.
En el plano económico, el líder del PP pone énfasis en la protección de la agricultura y ganadería como pilares regionales, abogando por la rentabilidad de las explotaciones, la reducción de la carga fiscal y el apoyo a los jóvenes en el sector agrario. Asimismo, promueve el desarrollo logístico, la reducción de impuestos, la simplificación burocrática y refuerza la idea de una reindustrialización, con especial interés en la provincia de Cuenca.
En el ámbito del bienestar social, propone despolitizar servicios fundamentales como la sanidad, educación y el Tercer Sector. Destaca la digitalización educativa, la gratuidad en la etapa 0 a 3 años, un plan para reducir las listas de espera médicas, y la contratación de más profesionales sanitarios.
Paco Núñez también incide en la importancia de promover la región y retener al talento joven, asegurando el acceso a la vivienda y promoviendo la creación de viviendas asequibles con el apoyo de recursos europeos.
El consenso en materia fiscal aparece como una meta, buscando una voz unánime en Castilla-La Mancha para negociar con el Estado un modelo justo de financiación y la supresión del impuesto de sucesiones, además de abogar por una reducción del tramo autonómico del IRPF.
En cuestiones hídricas, propone reescribir el Pacto del Agua vigente, considerando necesario reevaluar las cantidades de agua disponibles y las necesidades de Castilla-La Mancha frente a los trasvases, defendiendo que mientras existan déficits hídricos intrarregionales, no debe haber transferencias al Levante. Finalmente, se muestra crítico con respecto al uso compartido de las aguas del Tajo con Portugal.
Este abanico de iniciativas manifiesta el deseo del presidente del PP de Castilla-La Mancha por instaurar una política transversal, apartada de confrontaciones partidistas, en pro del avance y progreso de la región.
