Durante una visita este miércoles a la empresa ‘Inserta Toledo’, el presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha mostrado su repulsa frente a los actos de violencia, reaccionando así ante los recientes acontecimientos donde participantes en la celebración de fin de año en las inmediaciones de la calle Ferraz apaleaban a un muñeco que representaba al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Paco Núñez, al ser preguntado por los periodistas, ha condenado cualquier tipo de violencia, subrayando que no defenderá «ningún tipo de acto que pueda contener cualquier tipo de esencia vinculada con la violencia». Sin embargo, ha aprovechado para cuestionar la postura del PSOE ante el incidente, resaltando la actitud hipócrita que observa en el partido adversario.
El líder del PP castellanomanchego ha recordado a la opinión pública los «escraches violentos» dirigidos en el pasado por miembros del PSOE hacia representantes del PP, incluyendo a figuras como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y la ex presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, entre otros.
Núñez también ha planteado preguntas retóricas sobre la cantidad de veces que miembros del actual Gobierno y de ayuntamientos dirigidos por el PSOE han protagonizado escraches contra líderes del Partido Popular. Instó a una condena unánime de la violencia y apeló a la búsqueda de un ambiente político basado en el diálogo y el respeto mutuo, lejos de los extremos y la confrontación.
Al ser consultado sobre si el líder nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, debería haberse pronunciado sobre los sucesos ocurridos en Ferraz, Núñez ha indicado que su partido tiene una postura clara sobre este tipo de cuestiones y que la misma ya ha sido manifestada públicamente. Con su intervención, ha dejado en claro que espera una política que «abraza el entendimiento» y en la que todos los partidos rechacen cualquier forma de violencia.
