En recientes declaraciones durante una entrevista en Onda Cero Castilla-La Mancha, el presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, puso de relieve su perspectiva sobre la reforma del Estatuto de Autonomía de la región. Para Núñez, la modificación de la Ley Electoral, dentro del contexto del nuevo Estatuto, no es la cuestión más crítica. Su énfasis reside en la necesidad de evitar ajustes unilaterales en la ley electoral por parte de cualquier partido político, especialmente en periodos cercanos a los comicios, considerando indispensable salvaguardar el proceso democrático mediante la irreversibilidad de dicha ley sin el acuerdo de las principales fuerzas políticas.
La visión de Núñez aboga por proporcionar claridad y certeza a los votantes castellanomanchegos con respecto a las condiciones políticas y electorales que encontrarán al momento de ejercer su voto, garantizando así la estabilidad en las reglas del juego político.
El líder del PP reafirmó que el Estatuto de Autonomía de Castilla-La Mancha, más allá de focalizarse únicamente en aspectos electorales, posee un propósito mayor: el de modernizar y adecuar la región a los retos contemporáneos. El documento, tal como lo describe, se fundamenta en actualizar y promover la igualdad, así como en ofrecer lineamientos claros y efectivos para la prestación de servicios públicos como la sanidad, la educación y los servicios sociales, lo que implica una planificación y asignación presupuestaria adecuada.
Núñez también mencionó que el partido ha dedicado más de un año a un trabajo «discreto y leal», con la mira en el interés público, para alcanzar un consenso amplio en el Estatuto con el otro partido dominante de la Comunidad Autónoma. Se prepara así para la implementación del texto base ya registrado en el Parlamento autonómico en los próximos meses.
En un esfuerzo por enriquecer el Estatuerdo y asegurarse de que refleje fielmente la voz de los ciudadanos de Castilla-La Mancha, Núñez recalca la importancia de involucrar a la sociedad civil y sus respectivos colectivos. En vista de los cambios acaecidos desde la versión precedente de 1982, resalta la participación ciudadana como un pilar que fortalece la normativa y, por ende, la actividad política.
Como complemento a estas aspiraciones, el nuevo Estatuto de Autonomía contemplará también las inquietudes del Pacto Regional por el Agua, con la intención de que los recursos hídricos sean concebidos como fuente de tesoro y oportunidades, en vez de motivar disputas. Las declaraciones del líder popular cierran enfatizando su compromiso con un horizonte de progreso y bienestar para la comunidad de Castilla-La Mancha.
