Recientes documentos del Departamento de Justicia de EE.UU. han sacado a la luz que Donald Trump viajó al menos ocho veces en el jet privado de Jeffrey Epstein durante la década de 1990. Uno de esos vuelos incluyó a una joven de 20 años y sugiere una cercanía no antes revelada entre el expresidente y el pederasta, quien fue condenado por tráfico sexual de menores. Estos informes indican que Trump ha intentado distanciarse de Epstein y sus crímenes, pero los nuevos archivos, que fueron brevemente disponibles antes de ser eliminados, muestran que su conexión era más profunda de lo que se había informado anteriormente.
Un fiscal federal reveló que algunos de los que acompañaban a Trump en esos vuelos podrían ser relevantes como testigos en el caso contra Ghislaine Maxwell, la exsociedad de Epstein, condenada en 2021. Además, los documentos señalaron que el FBI había estado recopilando pistas sobre la relación entre Trump y Epstein. En un correo de enero de 2020, se detalló que Trump voló con Epstein en un periodo que encajaba con la investigación de Maxwell. Asimismo, se supo que en 2021 los investigadores emitieron una citación a Mar-a-Lago, la propiedad de Trump en Florida.
A medida que el Departamento de Justicia avanza en la divulgación de información sobre Epstein, se destaca cómo estas revelaciones podrían afectar la imagen pública de algunas figuras prominentes, incluido el expresidente. La atención sobre los vínculos de Trump con Epstein se intensifica en un contexto donde el escándalo de Epstein sigue generando repercusiones en el ámbito legal y social, mientras más detalles de su red de contactos siguen saliendo a la luz.
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