El presidente del Partido Popular (PP) de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha presentado en un desayuno informativo sus propuestas para el próximo programa electoral con el que busca gobernar la Comunidad Autónoma. Entre sus principales planteamientos se incluye la necesidad de reformar las leyes de Suelo y de Vivienda, así como el objetivo de que todas las empresas de la región contraten al cien por cien de los titulados universitarios cada año. Además, ha destacado la importancia de adaptar la formación profesional a las necesidades del mercado laboral local.
Núñez ha subrayado la urgencia de «recuperar la carrera profesional sanitaria» en Castilla-La Mancha, debido a su ubicación fronteriza. Para mejorar el sistema sanitario, ha propuesto tres acciones clave: restablecer la carrera profesional, implementar un plan de choque para reducir las listas de espera y modernizar la Atención Primaria. Ha denunciado que actualmente las esperas para ser atendido en los centros de salud oscilan entre 15 y 20 días, y ha señalado que esta situación se debe a que la región no resulta atractiva para los médicos, en parte por la falta de reconocimiento profesional.
El líder del PP también ha criticado la excesiva burocracia que afecta al sector agrícola y ganadero, pidiendo mayor flexibilidad en la Política Agraria Común (PAC) para garantizar la rentabilidad de las explotaciones. En este sentido, destacó su reciente encuentro con el Comisario Europeo de Agricultura, Cristophe Hansen, quien comparte su visión sobre la necesidad de un cambio.
Núñez ha abordado un tema crítico: el acceso al agua. Ha reclamado acciones para evitar que el agua del Tajo sea desviada para uso agrícola en Portugal, sugiriendo en su lugar un pacto nacional sobre la gestión de recursos hídricos. Recordó que el Pacto del Agua de Castilla-La Mancha, forjado por el PP, se encuentra inactivo desde 2020.
En el ámbito social, se refirió a datos alarmantes sobre pobreza en la región, mencionando que aproximadamente 200.000 castellanomanchegos se encuentran en situación de pobreza severa. Además, recordó la falta de inversión en Dependencia y la caída en la competitividad empresarial. Propuso la reducción de impuestos, como los relativos a la compraventa de suelo industrial y la eliminación del impuesto de sucesiones.
Respecto a la juventud, Núñez criticó la baja tasa de emancipación en la región y propuso una reforma en la Formación Profesional para que se adapte a las necesidades del mercado, asegurando que cada joven titulado tenga un contrato de seis meses en empresas locales. Argumentó que esta propuesta resultaría más económica en comparación con otros planes de empleo.
Finalmente, resaltó la necesidad de modificar las normativas urbanísticas para fomentar el desarrollo de la región, indicando que se debe tener en cuenta la diversidad entre áreas rurales y urbanas. Abogó por potenciar el sector de las energías renovables y la bioeconomía sin descartar la energía nuclear, y destacó el potencial de creación de empleo en sectores tecnológicos y logísticos mediante el uso de fondos europeos.
