A partir del próximo martes 9 de enero, la península ibérica y las Islas Baleares se verán afectadas por una Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA), la cual ingresará por el Cantábrico y traerá consigo una serie de fenómenos meteorológicos adversos. Este evento será seguido de cerca por un sistema de bajas presiones que, desplazándose desde el Estrecho hasta el nordeste peninsular, potenciará los efectos de la DANA.
Como resultado de este fenómeno, se prevé un episodio de intensas nevadas que daría comienzo el mismo martes 9 y se extendería durante el miércoles 10 y jueves 11 de enero. Se espera que las precipitaciones afecten a gran parte de la península y las Islas Baleares, con la excepción de Galicia, donde las probabilidades de precipitación son menores.
Dada la incertidumbre asociada a la posición y el grado de profundización de la DANA, existe una elevada incertidumbre respecto a la cota de nieve y la intensidad de las precipitaciones. No obstante, las previsiones más probables indican nevadas intensas el martes en regiones como el Ibérico sur, este de la meseta sur y oeste del sistema Central. En otras extensas zonas de la mitad norte y meseta sur, también se podrían presentar nevadas, aunque sin acumulados de importancia.
La cota de nieve podría descender a cualquier altura en el interior norte de la península, mientras que en el centro, la cota aumentaría de unos 600 a 1.200 metros, con alturas algo mayores previstas para la mitad sur, de acuerdo a lo informado por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
Para el día miércoles 10 de enero, las proyecciones indican precipitaciones en forma de nieve mucho más intensas en regiones como la Cordillera Cantábrica, meseta norte, sistema Ibérico y Pirineos, especialmente pronunciadas en el este. Las cotas oscilarán entre los 400 metros en el Cantábrico hasta alrededor de 1.000 metros en los Pirineos. Pese a las predicciones, no se descartan escenarios con cotas de nieve significativamente más bajas en el cuadrante nordeste y ligeramente inferiores en el resto de la península.
Para el jueves, se espera que las precipitaciones se limiten a la mitad norte y a Baleares, disminuyendo en intensidad en la mayoría de las zonas salvo en el extremo nordeste y el medio Ebro, donde aún se espera que sean intensas, con una cota de nieve que podría aumentar levemente.
En lo que respecta a las temperaturas, se anticipan heladas desde el martes y durante el miércoles en la meseta sur, en los sistemas montañosos y en la mayor parte del norte peninsular, las cuales se extenderían el jueves también al interior sur. Estas heladas podrían ser localmente severas en zonas como la cordillera Cantábrica, el sistema Ibérico, los Pirineos y el sistema Central.
Las temperaturas diurnas se mantendrán muy bajas, con máximas de apenas 5ºC que solo se superarían en las zonas costeras y el valle del Guadalquivir el martes, restringiéndose solo a las regiones costeras el miércoles y jueves.
El fenómeno se verá acentuado por los vientos del este en el valle del Ebro y en Baleares, con rachas que podrían llegar a ser fuertes el miércoles, intensificando la sensación térmica de frío. El miércoles por la tarde, se espera un cambio en la dirección del viento: a suroeste en Baleares, a nordeste en el extremo noroeste y a oeste en el resto del tercio oriental. El jueves, los vientos perderán intensidad con la excepción de Baleares, donde cambiarán a norte y se mantendrán fuertes.
La situación meteorológica comenzará a cambiar el viernes 12 de enero, cuando se prevé la entrada de un frente de aire más templado que conducirá a la reducción de las áreas con precipitaciones y a un ascenso generalizado de las temperaturas, si bien las temperaturas mínimas podrían seguir siendo bajas en el tercio nordeste del país.
